Fuerzas ucranianas recuperan 23 localidades

UE empuja cerco; Putin se apropia de central y bases

El bloque europeo ratifica apoyo a Zelenski y prevé topes al precio del gas para golpear su economía; el líder del Kremlin firma decretos para incautar como propiedad estatal el complejo de Zaporiyia y zonas anexadas

Soldados ucranianos lanzan un ataque contra líneas enemigas en Járkov, ayer.
Soldados ucranianos lanzan un ataque contra líneas enemigas en Járkov, ayer. Foto: AP

La Unión Europea (UE) impuso una nueva ronda de sanciones contra el régimen ruso de Vladimir Putin al reiterar que “nunca aceptaremos los falsos referéndums ni ningún tipo de anexión”, mientras la fuerzas ucranianas siguen recuperando territorio ocupado.

Ante la nueva escalada con la que Rusia busca arrebatar cuatro territorios a Ucrania —Donetsk, Lugansk, Jerson y Zaporiyia—, el bloque reiteró su respaldo al gobierno de Volodimir Zelenski y adelantó que fijará topes en el costo de los energéticos para vulnerar la economía del invasor, en medio de las disputas por el suministro de gas luego de las averías en los gasoductos rusos Nord Stream 1 y 2, que siguen bajo investigación.

Pese a la negativa de Moscú a limitar el precio en el sector, los 27 países acordaron dichas restricciones aunque no se definió el tope máximo, pues discutirán tal medida con las potencias del G-7, por lo que se estima que sea hasta hoy cuando se revelen las nuevas pautas, al tiempo que éstas entran en vigor, luego de meses en los que Rusia ha jugado con este recurso al amagar al continente con dejarlo sin gas ante el apoyo brindado a las fuerzas de Zelenski.

Además, alistan engrosar la lista de aliados rusos sancionados, con todos aquellos que fueron partícipes de la “farsa” de los referéndums o promueven la propaganda del Kremlin, y aumentar las restricciones a exportaciones del régimen, con miras a limitar los ingresos con los que éste garantiza suministros a los soldados invasores.

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Gráfico ı Foto: larazondemexico

Sin embargo, esas medidas no inquietan a Putin, pues ayer reforzó su embestida contra la nación invadida en la mesa y para sellar la anexión de las bases que considera “repúblicas independientes” firmó oficialmente la integración del bloque de hasta una sexta parte de territorio ucraniano a la Federación Rusa.

Ello luego de que ambas cámaras respaldaran los referéndums que la comunidad internacional insiste que no validará, como ocurrió con Crimea.

Con dichas acciones ratifica como líderes a los prorrusos que comandan a las fuerzas de esas provincias.

Además, el mandatario lanzó un decreto para incautar la central de Zaporiyia al señalar que toda la propiedad estatal debe ser transferida al gobierno ruso, hecho que la operadora Energoatom aseveró no tiene sustento legal.

Con ello, las fuerzas rusas incautarán, según lo previsto, el complejo del que aseguraban tener control total desde marzo pasado, pero como sus tropas no pudieron derrotar a los locales ahora la toman por “decreto”, casualmente a unos días de que el director, Igor Murashov, fuera secuestrado y liberado.

No obstante, hasta el cierre de esta edición no se reportaron incidentes en la región en la que se teme un desastre nuclear, como lo advirtió la Agencia Internacional de Energía Atómica (IAEA, por sus siglas en inglés), misma que anticipaba una segunda visita en menos de un mes.

Y, aunque Rusia insiste en sus planes de anexión, las fuerzas ucranianas no desisten y siguen empujando sus bases hacia territorios tomados por los rusos y en sólo cinco días ya suman hasta 23 provincias recuperadas.

El líder Zelenski resaltó que sólo en las últimas 24 horas se registró el mayor avance en la semana con nueve asentamientos bajo control de los suyos, un hecho significativo al destacar que la mayoría de estas regiones se ubican en Jerson y Lugansk, pues no han encontrado resistencia, pese a que son dos de las zonas que según Rusia ahora le pertenecen, pero en las que aún no tiene poder.

El secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Jens Stoltenberg, aplaudió estos esfuerzos al reconocer que a más de siete meses de los bombardeos y combates los de Zelenski siguen mostrando aplomo y coraje ante los ocupantes, mientras Kiev aguarda por una respuesta a la solicitud de adhesión acelerada.

Cabe destacar que en medio de estos tropiezos rusos, los mismos líderes de las regiones anexadas reconocen que están sufriendo varios golpes sin dar detalles en torno a las bajas y el arribo de refuerzos, pues según el Estado Mayor ucraniano el Kremlin engañó al mundo en torno a los reservistas.

Aunque Rusia anunció el mes pasado que convocaría a 300 mil soldados para la guerra, en realidad comenzó a entrenarlos y enviarlos a la nación vecina desde mayo pasado; es decir, a tres meses de iniciar la guerra.

Dicha información pone contra las cuerdas a los rusos, pero también surge información contra Ucrania, pues fuentes del gobierno estadounidense admitieron que líderes de esa nación podrían estar detrás del crimen de la periodista rusa Daria Dugina, confirmando las sospechas del Kremlin.

Fuentes del New York Times y CNN señalaron que Ucrania habría autorizado el uso del explosivo contra la hija de Alexander Dugin; sin embargo, no queda claro desde qué nivel vino la orden o si Zelenski estaba al tanto del hecho. Al respecto, mandos militares acotaron las críticas y señalaron que los únicos ataques contra rusos se han registrado en territorio ucraniano para expulsarlos del país.