Gobiernos aliados de Ucrania demandaron al presidente de Rusia, Vladimir Putin, revertir el reconocimiento de las regiones separatistas Lugansk y Donetsk como repúblicas; sin embargo, la Duma o Parlamento ruso ratificaron el posicionamiento del líder del Kremlin.
La Unión Europea (UE) demandó echar atrás de manera inmediata la violación al derecho internacional, reiterando que habrá consecuencias severas si persisten en dicho posicionamiento.
Asimismo, el alto representante de política exterior del bloque de los 27, Josep Borrell, aseveró que responderán al acto ilegal que socava la soberanía ucraniana, esto mientras hoy se reúnen los ministros de Exteriores de la región para definir en conjunto las sanciones que aplicarán con Rusia y las zonas independentistas, pues la líder del Consejo Europeo, Ursula von der Leyen, advirtió que hoy mismo definirán un primer paquete de restricciones.
Por separado, el G-7 condonó la agresión rusa y ministros de éstas potencia divirtieron que siguen de cerca la situación para definir las sanciones, mismas en las que ya se adelantaron Estados Unidos, Gran Bretaña y Alemania por separado.
Y es que con la orden de despliegue de tropas rusas en las regiones separatistas anticipa una posible invasión o posible anexión como en 2014 con Crimea, pues la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) advierte que éste es el paso previo a un ataque a gran escala.
Horas después, el Senado ruso aprobó el anuncio de Putin al respaldar el envío de tropas al extranjero como parte de una misión de paz.
avc