La Unión Europea se lanzó ahora contra Reino Unido por supuestamente provocar un reparto desigual de vacunas al bloquear envíos para avanzar a un mayor ritmo en comparación con las naciones del bloque.
Luego de que la Comisión Europea frenó una entrega de 250 mil dosis a Australia, ésta dijo que los británicos hicieron lo mismo para garantizar su inmunización.
Sin embargo, el primer ministro, Boris Johnson, rechazó los señalamientos: “No hemos bloqueado la exportación de una sola vacuna o componentes”.
De acuerdo con estimaciones, mientras la UE reporta sólo nueve por ciento de adultos vacunados, en Reino Unido el avance es de hasta 35 por ciento.
Tras las declaraciones, el gobierno de esa nación exigió al enviado de la UE explicar los señalamientos del líder del Consejo, Charles Michel, al señalarlos directamente de impedir la salida de lotes de biológicos, lo que eleva la afrenta que mantiene con la farmacéutica AstraZeneca, a la que acusó de priorizar a esta nación y a otras fuera del continente antes que a la región, a lo que la empresa respondió que cumple en el orden que firmó los contratos.
En tanto, Michel comentó que ojalá estas diferencias abran paso a la transparencia para conocer el reparto real de las dosis.
El enfrentamiento generó críticas en el Reino Unido, donde algunos dirigentes aplaudieron la separación de la región, y coincidieron que más allá de la acusación, la región ha tenido problemas para conseguir dosis, pues varios fabricantes han reportado retrasos, como Pfizer y Moderna.