Con las restricciones migratorias, docenas de universidades estadounidenses con sede en Italia podrían cerrar sus puertas para siempre, ya que gran parte de la plantilla docente y la matrícula estudiantil provienen de Estados Unidos, uno de los países desde donde la Unión Europea prohíbe los viajes, por temor a un potencial contagio de COVID-19.
De acuerdo con un informe citado por el diario The Guardian más de 35 mil estudiantes matriculados en universidades estadounidenses en Italia no pueden regresar, dadas las restricciones establecidas para contener la propagación de COVID-19.
"Es una situación muy dramática en la que casi todas las sesiones de estudio de verano en persona ya han sido canceladas", dijo Matteo Duni, presidente de la Asociación de Académicos de las Universidades Estadounidenses en Italia.
Algunas instituciones pequeñas y medianas corren el riesgo de cerrar por falta de inscripciones, y otras universidades estadounidenses con programas en Italia podrían decidir mantener a sus estudiantes en Estados Unidos, agregó.
Hay más de 160 instituciones estadounidenses de educación superior en Italia, entre colegios, escuelas de verano y universidades, la mayoría de las cuales se encuentran en Roma y Florencia.
Entre los más famosos están la Universidad Syracuse, de Nueva York, que tiene un campus en Florencia, la Universidad de Cornell y la Universidad de Temple en Roma.
Con el inicio de la emergencia del coronavirus en Italia, entre finales de febrero y principios de marzo, todos los estudiantes estadounidenses en Italia fueron enviados de regreso a Estados Unidos por sus campus de origen. De ninguna manera está claro cuándo los estudiantes pueden regresar a Italia.
"Éste no es sólo un problema italiano. Otros países europeos, como Francia y España, también se ven afectados porque ellos también albergan a cientos de instituciones estadounidenses", explicó Duni.
ntb