Luego de lanzarse indirectas y presiones mutuas los aspirantes a la vicepresidencia en Estados Unidos, Tim Walz, por la campaña demócrata de Kamala Harris, y JD Vance, aliado de Donald Trump, acordaron realizar un debate.
“Nos vemos el 1 de octubre”, lanzó el gobernador liberal de Minnesota en su cuenta de X en un mensaje dirigido al senador ultraconservador, acto que el joven político que en esta campaña adoptó un perfil similar al del empresario, con ataques a la actual vicepresidenta, respondió también en redes sociales al aceptar esa cita.
Con ello, se define la fecha entre las cuatro opciones propuestas por la cadena anfitriona CBS, que será cinco semanas antes de la elección presidencial y bajo la organización del programa Face the Nation. Esto sólo tres semanas después del primer cara a cara que tendrán el magnate republicano y la número dos de EU, programado por ABC News para el próximo 10 de septiembre.
La cita será la primera a la que se suma Kamala Harris para comparar propuestas luego de relevar al presidente Joe Biden por la candidatura, con lo que se engrosa la agenda a días de que la primera mujer de color en llegar a la vicepresidencia sea oficializada como nominada, pues la Convención Nacional Demócrata arranca el próximo 19 de agosto.
Y horas después Harris continuó con su campaña al realizar su primer acto de campaña junto al ejecutivo federal, quien le entregó la batuta en Maryland.
Con ese acompañamiento y mensaje reivindica el apoyo total para convertirse en su sucesora, pues confía en que será una “extraordinaria presidenta”. Durante el evento, Joe Biden aprovechó para defender a su aliada del exlíder a quien llamó Donald “Dump”, que significa “basurero”, al devolverle una de las tantas afrentas que el republicano le ha lanzado.
Mientras que el republicano mantiene su conducta frontal al insistir en ataques directos y personales contra Harris. En una conferencia en Nueva Jersey justificó que tiene todo el derecho de tomar esa postura porque no le tiene respeto como funcionaria y considera que de ganar tendrá una gestión “terrible”.