EU advierte a Norcorea ante respaldo al Kremlin

Viaja Jong-un a Rusia por acuerdo de armas

Mandatario Llega A territorio aliado a un foro económico y para reunirse con su homólogo, Vladimir Putin; es su primera salida desde 2019; Moscú confía en “relación beneficiosa”

El tren de Kim Jong-un avanza hacia territorio ruso, ayer.
El tren de Kim Jong-un avanza hacia territorio ruso, ayer. Foto: AP

Tras un viaje de 20 horas, el líder norcoreano, Kim Jong-un, arribó ayer a Rusia para reunirse hoy mismo con su homólogo, Vladimir Putin, acto que vigila Occidente ante el posible suministro de armas para redoblar los ataques contra Ucrania.

Desde temprana hora aumentó la especulación ante el encuentro luego de que agencias asiáticas reportaran que un tren blindado —transporte preferido por la seguridad del líder de Pyongyang— partió el pasado 10 de septiembre rumbo a Khasan, la entrada a Moscú.

Horas después el medio japonés Kyodo confirmó el arribo de éste a territorio euroasiático, al tiempo que la Agencia Central de Noticias norcoreana (ACNC) confirmó que el jefe de Estado “se reunirá y conversará con el camarada Putin”, su primer viaje al exterior en cuatro años, desde la pandemia de Covid-19.

Sin embargo, no adelantó las prioridades del acercamiento bilateral que ya anticipaba Estados Unidos desde la semana pasada ni un posible acuerdo en torno a un intercambio armamentístico-militar a más de 18 meses de la guerra, pues se sabe que junto a Kim viajaron su ministra de Exteriores, Choe Son-hui, y varios mandos comunistas y de las Fuerzas Armadas; pero fuentes asiáticas detallaron que su permanencia se prolongará algunos días con motivo del Foro Económico Oriental, con lo que no queda claro cuándo será la reunión entre éstos.

Pero se teme que el régimen que retomó recientemente sus pruebas balísticas cerca de Corea del Sur y Japón suministre equipo especial a las tropas que permanecen en las regiones que arrebató ilegalmente al gobierno de Volodimir Zelenski.

Y es que el régimen que invadió Ucrania también evitó detalles en la materia, pues el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, sólo reveló a la prensa que ésta “será una visita en toda regla”, presuntamente en Vladivostok, con miras a establecer “relaciones mutuamente beneficiosas”, según la agencia estatal TASS. Incluso, agregó que por el momento sólo se prevén un encuentro de ambas delegaciones y será hasta después de éste que se decidirá si habrá otro en privado.

Dicha situación pone en alerta a los aliados de Zelenski debido a las altas probabilidades de que Pyongyang entregue equipo especial a Putin, como negoció con Irán, pues la región invadida acusó a las tropas enemigas de usar drones de Teherán para atacarlos desde hace meses.

Por ello, el gobierno de Joe Biden advirtió a Norcorea del riesgo si proporciona armas o equipo a Moscú e instó nuevamente a Pyongyang a no solventar el abasto de reservas del ocupante, pues ello representaría una violación al Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

En tanto, los defensores ucranianos se preparan para una posible embestida, pues tras el viaje de Jong-un se reportó que el recién nombrado ministro de Defensa, Rustem Umerov, se comunicó con su homólogo estadounidense, Lloyd Austin, para exponer las prioridades de su contraofensiva contra un régimen que redobla la presencia militar en la zona, al reubicar bases en los límites con Finlandia.