En el marco del Día Internacional del Trabajo, policías y manifestantes mantienen un enfrentamiento en París, dos horas antes de las manifestaciones del 1 de Mayo sujetas a estrictas medidas de seguridad.
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La policía utilizó gases lacrimógenos para controlar a la multitud que se reunía cerca de la estación de Montparnasse de París.
Grupos de personas encapuchadas y vestidas de negro salieron a las calles con el objetivo de gritar consignas contra la policía. Entre los manifestantes también había quienes portaban chalecos amarillos o agitaban banderas de los sindicatos.
Las autoridades francesas han advertido de que “activistas radicales”pueden unirse a la manifestación de París y protagonizar nuevas escenas de violencia como las que marcaron las protestas anteriores de los chalecos amarillos y las manifestaciones del Primero de Mayo en los últimos dos años.
Hasta el momento, los agentes detuvieron a 88 personas para prevenir altercados en la ciudad.
Las fuerzas del orden utilizan nuevos dispositivos legales que les permiten realizar controles de identidad en lugares incluso alejados de los puntos de concentración para registrar a las personas.
Detienen así a los que llevan todo tipo de artefactos incendiarios, objetos que podrían utilizarse como armas u otros instrumentos o prendas para ocultar su propia identidad.
Entre los arrestados hubo al menos tres españoles que llevaban artefactos incendiarios u otros objetos contundentes.
Además, la Confederación General del Trabajo (CGT) organizó 199 manifestaciones en toda Francia con motivo del Día del Trabajo, aunque la que atrae la mayor atención es la de París, que está programada a partir de las 14.30 locales (12.30 GMT) entre la estación de Montparnasse y la plaza de Italia.
Durante las marchas, unos 600 establecimientos comerciales tienen que permanecer cerrados ante el temor de las autoridades de que puedan sufrir ataques por parte de grupos violentos.
El ministro francés de Interior, Christophe Castaner, calculó que hay entre mil y dos mil "activistas radicales", entre ellos, algunos provenientes de países vecinos, así como grupos de "chalecos amarillos" también radicalizados.
Réaction immédiate des forces de l’ordre à #Paris pour empêcher tout débordement en marge des #manifestations du #1erMai : mobilité, rapidité et riposte adaptée. pic.twitter.com/ge6Rnp8AXA
— Ministère de l'Intérieur (@Place_Beauvau) 1 de mayo de 2019
A través de su cuenta de Twitter escribió "reacción inmediata de la Policía a #París para evitar cualquier desbordamiento en los márgenes del #Mayo 1: movilidad de eventos, velocidad y respuesta adaptadas".
En otro punto alejado de la ciudad, Jean-Marie Le Pen, fundador del ultraderechista Frente Nacional (ahora transformado en Agrupación Nacional por su hija, Marine) rindió homenaje a Juana de Arco en una estatua que hay junto al jardín de las Tullerías.
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