El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, busca renovar el ataque de sus fuerzas contra los invasores al destituir al ministro de Defensa, Oleksi Reznikov, quien asumió el mando de las Fuerzas Armadas el tres meses antes de que estallara la guerra.
Desde el aniversario del primer año de la guerra contra Rusia medios locales adelantaron que el mandatario defensor evaluaba perfiles para asumir las riendas del ejército ante presuntas sospechas de corrupción en la cúpula militar, en medio del escándalo de compras irregulares y hasta absurdas por el elevado gasto, y casi medio año después hizo oficial el ajuste al asegurar en un mensaje en vivo: “he decidido reemplazar al ministro de Defensa, Oleksi Reznikov”.
Tras más de 550 días del conflicto con el que el Kremlin les arrebató cuatro territorios, Zelenski aseveró que el país “necesita nuevos enfoques y otros formatos de interacción tanto con los militares como con la sociedad en su conjunto”, en referencia a la actual contraofensiva de sus tropas para expulsar a los soldados invasores, los mismos que siguen bombardeando zonas clave para ampliar los ataques y lograr sus objetivos territoriales.
En su discurso, Zelenski adelantó que su propuesta para asumir el Ministerio de Defensa es Rustem Umerov, actual presidente del Fondo de Propiedad Estatal, quien resaltó “no necesita ninguna introducción adicional”.
Pero aún no es un hecho, pues la decisión recae en el Parlamento que votará el cambio, pero el presidente confía en que los legisladores “apoyen a ese candidato”.
Hasta el momento se desconoce si Reznikov será reubicado en algún otro departamento o si mantendrá alguna relación con la toma de decisiones en torno a las ofensivas ucranianas, pues además de dirigir las operaciones fue clave en la coordinación para que Kiev recibiera ayuda a países aliados en las negociaciones para obtener armas, municiones y apoyo económico, como el caso más reciente del envío de tanques de combate y el compromiso de que los dotarán de cazas F-16 para proteger su cielo y a la población de los constantes ataques aéreos del invasor.
Leo