Este lunes, el gobierno mexicano anunció que iniciará un proceso de solución de controversias ante la Organización Mundial de Comercio (OMC), por las medidas arancelarias que dio a conocer el departamento de Comercio de Estados Unidos.
[caption id="attachment_748891" align="alignleft" width="419"] Gráfico: La Razón de México[/caption]
A través de un comunicado, la Secretaría de Economía (SE) señaló que México considera que las medidas impuestas por el vecino país del norte, al amparo de la Sección 232 de su legislación, argumentando amenazas a su seguridad nacional, violan el Acuerdo sobre Salvaguardias de la OMC, al no haberse adoptado conforme a los procedimientos ahí previstos; aunado a que violan el Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio de 1994 (GATT 1994).
“El gobierno de México refrenda que sus acciones continuarán apegándose al estado de derecho comercial internacional, y serán proporcionales al daño que México lamentablemente reciba”, refiere el documento.
La semana pasada se dio a conocer la decisión de México de imponer aranceles a algunos productos estadounidenses, por la medida de tasar las importaciones de acero y aluminio que llegaban a Estados Unidos desde México, Canadá y la Unión Europea.
Este lunes, la Casa Blanca defendió la decisión del presidente Donald Trump y descartó que estas acciones afecten las relaciones con sus socios comerciales.
“Tenemos fuertes relaciones con México, Canadá y la Unión Europea, y continuarán aun cuando estén los gravámenes”, señaló la portavoz presidencial, Sarah Huckabee Sanders.
Pérdida de empleo. Por otra parte, la Unión Sindical Minera y Metalúrgica advirtió sobre la pérdida de hasta 20 mil empleos directos, así como alzas generalizadas en algunos productos, tras la imposición de aranceles de Estados Unidos.
En conferencia de prensa, Carlos Pavón, secretario general del Sindicato de Trabajadores Mineros Metalúrgicos, señaló que aunque los efectos no serán en el corto plazo; los puestos de trabajo, las revisiones salariales y la operación misma de las empresas están en riesgos.
Añadió que ante este contexto, el pensar en subsidios es la última medida emergente que podrían tomar, toda vez que existen acciones que pueden generar una reacción para que en el menor tiempo posible se revierta la decisión del gobierno estadounidense.
[caption id="attachment_748890" align="alignnone" width="696"] Gráfico: La Razón de México[/caption]
Asimismo, comentó que aunque la medida genera un entorno complejo, las empresas que representan, no se han pronunciado respecto a posibles recortes o medidas que respondan a la decisión estadounidense.
Es de recordar que en línea con lo esperado, la administración de Trump anunció el jueves la imposición de aranceles del 25 por ciento a las importaciones de acero y de 10 por ciento a las importaciones de aluminio, procedentes de Canadá, México y de la Unión Europea.
Con ello, los afectados tomaron represalias en contra de dichas medidas, las cuales desataron las críticas de los aliados republicanos del presidente en el Senado y la Cámara de Representantes, así como de la cúpula empresarial representada por la Cámara de Comercio de Estados Unidos, además de organizaciones sindicales.
“Durante meses, Estados Unidos ha tenido discusiones con Canadá, México y la Unión Europea para encontrar una alternativa. Sin una solución, los aranceles son las únicas medidas apropiadas para salvaguardar al país”, aseguró la portavoz de la Casa Blanca.
La perspectiva de la Casa Blanca surge después que tres organizaciones, financiadas por los billonarios republicanos Charles y David Koch, anunciaron una campaña mediática para denunciar los aranceles de Trump como lesivos a la economía estadounidense.
Los grupos Americans for Prosperity, Freedom Party y la hispana The Libre Initiative defendieron el libre comercio y criticaron las barreras arancelarias.
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