Alrededor de 11 sectores industriales en el mundo suman una deuda de 2.2 billones de dólares, pero en emisiones de CO2, lo cual es calificada como “elevada a riesgos ambientales”.
De acuerdo con Moody’s, el riesgo de transición a menores emisiones de CO2 es una consideración crediticia importante para 10 sectores, sujetos a regulación que limita las emisiones de carbono y calificados con riesgo elevado.
A medida que los gobiernos cumplan con sus compromisos del Acuerdo de París, el endurecimiento de los regímenes que regulan las emisiones de CO2 tendrá una repercusión tangible en los sectores industriales más expuestos a nivel global.
Asimismo, los dos sectores que más emiten y no reguladas son el sector eléctrico y energético, y carbón, los cuales representan un total de 517 mil millones de deuda ambiental calificada. Para otros nueve sectores, incluyendo fabricantes de automóviles, exploración y producción de petróleo y gas y productos químicos, su elevada exposición ambiental puede resultar significativa para la calidad crediticia en un periodo de tres a cinco años. Estos sectores representan una deuda calificada de 1.7 billones de dólares.
Además, “las compañías no reguladas del sector eléctrico y energético están directamente expuestas a la presión de políticas públicas para reducir las emisiones de carbono y esto continuará afectando sus modelos de negocio y poniendo presión en los márgenes en economías maduras”, afirmó Rahul Ghosh, Senior Vice President de Moody’s.
Otros 22 sectores con 10.1 billones de dólares en deuda tienen exposición crediticia a riesgos medioambientales.
