Petróleos Mexicanos (Pemex) logró una transacción financiera en los mercados internacionales para reducir su deuda en dólares, así como sus obligaciones financieras de corto plazo; operaciones que fueron anunciados en días pasados por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Como resultado de dichos movimientos se lograron los siguientes dos objetivos:
Reducción en la deuda total de Pemex por 5 mil millones de dólares, con los recursos de la aportación patrimonial del gobierno federal.
Refinanciamiento de pasivos por un monto de 20 mil 130 millones de dólares.
Refinanciamiento de pasivos de Pemex
La operación de manejo de pasivos tuvo los siguientes tres componentes:
La colocación de tres bonos de Pemex a 7, 10 y 30 años por un monto de 7 mil 500 millones de dólares para refinanciar deuda de corto plazo.
Recompra e intercambio de bonos denominados en dólares que vencían entre 2020 y 2025 por un monto de 8 mil 743 millones de dólares, por bonos de largo plazo.
Intercambio de bonos en dólares con vencimiento entre 2041 y 2048 por un monto de aproximado 3 mil 887 millones de dólares.
Es importante resaltar que en esta operación la demanda total de bonos de Pemex por parte de los inversionistas internacionales superó los 50 mil millones de dólares, monto que representa casi la mitad de la deuda de Pemex, lo que convierte a esta transacción en la de mayor demanda en la historia de la empresa.
Los bonos de mayor plazo fueron los más demandados en el mercado, lo que demuestra la confianza de los inversionistas en la fortaleza de Pemex a largo plazo.
Gracias a esta transacción, la empresa redujo su riesgo de refinanciamiento para los próximos años. Esta operación constituye el ejercicio de manejo de pasivos más grande realizado por un emisor mexicano en la historia.
Asimismo, con el fin de mitigar el costo financiero de la operación se intercambiaron bonos de largo plazo.
A la fecha se observa una mejoría en el sentimiento de riesgo del mercado hacia Pemex, con respecto al inicio del mes de septiembre, lo que se ha traducido en una reducción de los “credit default swaps” (CDS) de Pemex a 5 años en 41 puntos base.
lps