La caída de 0.1 por ciento de la economía nacional durante el año pasado y la falta de confianza por parte de inversionistas provocaron que Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) disminuyera de 1.0 a 0.9 por ciento su expectativa de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB).
En conferencia de prensa, Ángel García-Lascurain Valero, presidente nacional del IMEF, comentó que es probable que este año se tenga un panorama de debilidad que dificultará alcanzar un crecimiento mayor a 1.0 por ciento, y aún más a 2.0 por ciento como lo espera el Gobierno federal.
Entre los factores de riesgo que observan son: menor generación de empleo, inseguridad, menor confianza para invertir, un incremento en la inflación y la calificación de la deuda soberana.
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En torno al brote de COVID-19, el IMEF aún no contempla impactos en la economía. En este sentido Mario Correa, vicepresidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del Instituto, indicó que "todavía es un proceso que se está dando, no se ha logrado contener y ahora con los contagios en Italia nos deja claro que el problema sigue".
Añadió que el brote del virus va a tener un impacto negativo en China, pero no saben qué tan significativo será para la economía global.
"Para México nos puede afectar en turismo o comercio, por las medidas de contención. Hay que esperar como se actúa, hay mucha incertidumbre", advirtió.
Destacó que si el COVID-19 no es controlado en abril, el impacto sería mayor en la economía mundial. Y es entonces, señaló, cuando se podrán dar estimados en México de los efectos, los cuales calculó menores a los ocasionados por el combate al huachicoleo el año pasado.
JVR
