El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) arrojó que durante el sexto mes del año la tasa anual de inflación llegó a 3.33 por ciento, con un avance mensual de 0.55 por ciento, cifra superior a la prevista por los analistas, quienes esperaban un repunte de 0.44 por ciento.
Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) señalan que la cifra representó su nivel más alto desde febrero pasado, cuando se ubicó en 3.7 por ciento, y es el mayor incremento que se ha observado en todo el año.
El repunte, agregó el Inegi, estuvo influenciado por el alza en los precios de las gasolinas, el gas y algunos alimentos como el pollo, principalmente.
“Esta cifra fue superior al consenso en 0.44 por ciento, el cual se encontraba muy cercano a nuestro pronóstico (0.42 por ciento). Destacamos varios cambios, tanto en la subyacente como no subyacente”, refiere Banorte Casa de Bolsa.
Refirió que los bienes explicaron la mayor parte del aumento al subir 0.6 por ciento, pero con presiones concentradas en otras mercancías, con un avance de 0.9 por ciento, mientras que los alimentos procesados se moderaron 0.4 por ciento tras alzas mayores a 1.0 por ciento en los dos últimos meses.
“En nuestra opinión esto podría estar relacionado con la reapertura de la economía, que comenzó este periodo”, apuntó en un análisis.
Banco Ve Por Más (Bx+) aseguró que la recuperación en los precios del petróleo tuvo una fuerte incidencia en el componente no subyacente, que se refiere a los costos de los productos más volátiles.
En el caso del índice subyacente, informó que también se movió al alza y todavía muestra al interior un comportamiento mixto, al tiempo que las mercancías se presionan y los servicios se desaceleran. Hay que recordar que el Inegi ajustó el levantamiento de precios a causa de la pandemia en los últimos meses.
El incremento del índice en junio, demuestra que la inflación se encuentra dentro del rango del Banco de México (Banxico) de 3.0 por ciento +/- 1.0 punto porcentual en los últimos 13 meses; no obstante, Gabriela Siller, directora de Análisis Económico-Financiero de Banco Base, aseguró que estos repuntes pueden presionar al organismo monetario para que la tendencia bajista en las tasas de interés se vaya desacelerando.
“La evidencia de presiones inflacionarias genera la especulación de que el Banco de México será más cauteloso en sus recortes a la tasa de interés. Banco Base mantiene la expectativa de que Banco de México seguirá recortando su tasa de interés hacia 4.0 por ciento al cierre del año, debido principalmente a la holgura económica”, sostuvo.
Banorte añadió que después de conocer los datos recientes, anticipa mayores riesgos al alza, en particular por más presiones en el rubro subyacente, a pesar de una mayor holgura de la economía, principalmente en las mercancías; y el componente no subyacente subiendo más de lo que ha anticipado.
Con información de Reuters.
JVR
