El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Organización Internacional de Trabajo (OIT) informaron que la transición hacia una economía menos carbonizada generaría 2.1 millones de empleos en México a lo largo de 10 años.
El estudio titulado “El empleo en un futuro de cero emisiones netas en América Latina y el Caribe”, realizado entre ambas instituciones, señala que México se encuentra entre los cuatro países donde la descarbonización de la economía afecta de forma negativa a más de 1 por ciento del empleo, donde también se ubican Brasil, Honduras y Venezuela.
Sin embargo, el país destaca entre las economías donde es más económica la energía eólica y solar. Los servicios públicos en México, Perú y Chile adquieren esos combustibles por 3 centavos de dólar por kilovatio hora (kWhora), señala el estudio.
La OIT y el BID prevén la creación de 15 millones de empleos nuevos en América Latina y el Caribe, al relevar los negocios vinculados con la explotación de energías fósiles y el uso intensivo del campo para la ganadería por la producción de energías más limpias y la expansión de la agricultura.
La transición eliminaría 7.5 millones de trabajos en la extracción y explotación de combustibles fósiles y la ganadería, pero serían compensados en agricultura, producción de alimentos de origen vegetal, energías renovables, silvicultura, construcción y manufactura.
Para lograrlo, los países necesitan garantizar un pasaje a una "economía más sostenible", ya que es fundamental que se apliquen políticas que actúen "hacia la igualdad".
También deberán apoyar a los trabajadores, empresas y comunidades que se verán directamente afectadas por la reducción del tamaño de las industrias que en este momento son más contaminantes, con las vinculadas con la ganadería y los combustibles fósiles.
La OIT estima que el cambio climático expulsará a 2 millones 500 mil trabajadores de sus ocupaciones, sobre todo en el sector agropecuario, la construcción y el comercio ambulante.
Por su parte, el BID proyecta que para 2050, los daños causados por el cambio climático costarán a la región 100 mil millones de dólares anuales.
En este sentido, los organismos remarcaron que "ha llegado la hora de crear un futuro más inclusivo, resiliente y sostenible", ya que el actual déficit de trabajo decente, las desigualdades y la dependencia en las exportaciones de combustibles fósiles hacen que América Latina y el Caribe sean "particularmente susceptibles" a los efectos sociales y económicos de la actual pandemia.
JVR