Por ser un cliente cumplido y tener un historial crediticio “limpio”, los bancos o tiendas departamentales pueden ofrecerte un préstamo preaprobado, dinero que te caer muy bien en estos momentos económicos difíciles por la crisis de COVID-19, ya que podrías usarlo para un imprevisto o gasto importante
Al hacerte este ofrecimiento, la institución ya evaluó tu perfil e historial crediticio y ha verificado que puedes obtenerlo. Las instituciones analizan variables como el comportamiento de pagos y depósitos, entre otros.
Generalmente no tienes que presentar más requisitos para que te den el crédito, pues el banco calcula la cantidad de dinero que te puede prestar y hasta te ofrece plazos para que cubras el adeudo.
Es importante mencionar que en la mayoría de los bancos los créditos pueden tramitarse desde una app. Esta forma te puede evitar acudir a sucursal en el contexto de la pandemia de COVID-19.
Si bien los préstamos bancarios son una herramienta que te pueden ayudar a cumplir tus metas, se debe tener precaución para evitar ser víctima de los intereses.
¿Me conviene un préstamo preaprobado?
Para evaluar si es conveniente aceptar o no un préstamo preaprobado debes tomar en cuenta lo siguiente:
Ventajas
- Los créditos muchas veces son a tasa fija
- Normalmente no hay penalización por pagos anticipados, así que si consigues el dinero podrás saldar tu deuda sin pagar alguna comisión extra
- No vas a enfrentarte al papeleo y todos los requisitos que te piden al solicitar un crédito
Desventajas
- Si lo aceptas sólo debes cuidarte de los intereses, pues si no realizas los pagos tu deuda se puede incrementar.
¿Para qué utilizar un préstamo preaprobado?
La recomendación es que utilices el dinero para enfrentar algún imprevisto o un gasto importante, nunca para darte un gusto.
Por ejemplo, si tienes deudas en varias tarjetas de crédito o departamentales podría ser una buena opción tomar ese préstamo para unificar deudas. Así tendrías tus pagos con una tasa fija, un solo interés y una sola institución.
JVR