La decisión de la Secretaría de Economía (SE) y la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) de sacar del mercado 25 productos entre quesos y yogur dio pie a una escalada de declaraciones por parte del sector lácteo mexicano que aseguró que la prohibición no tuvo fundamentos válidos; mientras que las autoridades federales aseguraron que fue una “medida histórica” en favor de los consumidores.
La preocupación del empresariado por la suspensión de la venta de quesos de FUD, Philadelphia, Caperucita, Nochebuena, Lala, Portales, Zwan, entre otros; fue manifestada por el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) a la Profeco, por lo que ayer mismo los buscarían para aclarar la situación.
“Al rato te van a hablar todos nuestros amigos de los quesos y de las leches y estoy seguro de que están preocupados por las acciones. Ojalá la sensibilidad sea lo más importante”, indicó Carlos Salazar Lomelín, líder del CCE, a Ricardo Sheffield Padilla, titular de la Profeco.
De forma separada, las marcas afectadas por la sanción también manifestaron su inconformidad. Mondelēz México, fabricante del queso Philadelphia, sostuvo que la prohibición está “totalmente infundada”, además de que genera un duro golpe a la reputación de la marca.
Grupo Lala señaló que su queso manchego deslactosado, es 100 por ciento de leche y cumple con las normas. Lo mismo fue declarado por FUD, que tiene sanciones en cuatro presentaciones de quesos.
Danone, que tiene prohibida la venta de dos productos, dijo que la inmovilización de mercancías es extemporánea, pues las etiquetas fueron modificadas, acto que se le hizo saber a la autoridad.
Sin embargo, más tarde el titular de la Profeco sostuvo en una entrevista televisiva que las marcas afectadas tuvieron más de medio año para acatar la norma.
En defensa de sus agremiados, la Cámara Nacional de Industriales de la Leche (Canilec) aclaró que la prohibición de la venta de quesos y yogur natural afecta a presentaciones particulares y no a las marcas en general, por lo que los productos no señalados seguirán teniendo presencia continúa en los anaqueles.
Indicó que la mayoría de las observaciones refieren a imprecisiones o errores en la forma de declarar el nombre o denominación del producto, los ingredientes, el país de origen, o la omisión en la etiqueta de algunos parámetros en el queso como la humedad, grasa y proteína.
De forma más severa, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) calificó como irresponsable el actuar de la Profeco y la Secretaría de Economía por la prohibición.
De acuerdo con un documento emitido por la Secretaría de Economía, la NOM de Queso (NOM-223-SCFI/SAGARPA-2018) determina que las etiquetas de los productos deben dejar en claro su porcentaje mínimo de grasa butírica, proteína y el máximo de humedad, y cuando se emplee leche que no procede de vaca, se debe indicar su origen.
Respecto a la NOM de Yogur (NOM-181-SCFI/SAGARPA-2018) los productos deben cumplir especificaciones fisicoquímicas: proteína de 3.1 por ciento, grasa butírica de máximo siete por ciento, acidez titulable expresada como porcentaje de ácido láctico, de mínimo 0.5 por ciento; y sólidos lácteos no grasos, de 8.25 por ciento.
- El dato: El frente de productores de leche celebró que la decisión del Gobierno se diera después de 25 años.