El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) consideró imprescindible que el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2021 cuente con alternativas que mitiguen los efectos de la pandemia del nuevo coronavirus, específicamente, en el derecho a la alimentación.
En el Día Mundial de la Alimentación, el organismo señaló la necesidad de garantizar que mexicanas y mexicanos tengan acceso a una alimentación nutritiva y de calidad, una tarea pendiente que se vuelve apremiante en esta emergencia sanitaria provocada por la enfermedad COVID-19.
Refirió que en 2018, 20.4 por ciento de la población mexicana presentaba carencia por acceso a la alimentación; la población hablante de una lengua indígena fue el grupo con mayor prevalencia, de acuerdo con la medición multidimensional de la pobreza 2018.
En el documento “Consideraciones para el proceso presupuestario 2021”, el Coneval recomienda que en la integración del PEF se contemplen los derechos sociales como elemento central del quehacer gubernamental.
El consejo identificó 30 programas relevantes para la atención del derecho a la alimentación nutritiva y de calidad. Esto quiere decir que de los 149 programas sociales que operan en 2020, poco más de 20 por ciento contribuyen al acceso efectivo de este derecho.
Se requiere consolidar la política nacional en torno al derecho a la alimentación, ya que actualmente esta se encuentra fragmentada en diversas estrategias e iniciativas desarrolladas de manera independiente una de otra y poco vinculadas entre sí, añadió.
JVR
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