El principal problema que enfrenta México es que su política monetaria, fiscal y económica están descoordinadas, por lo que si una hace lo correcto para crecer no tiene el efecto deseado, porque las otras van en direcciones opuestas, aseveró Carlos Capistrán, economista en Jefe de Bank of America (BofA)Securities para México y Canadá.
El experto señaló que dicha situación también inhibe la inversión privada, ya que al percibirse que todo está descoordinado no se genera la confianza necesaria para que lleguen recursos al país.
"Lo primero que necesitamos es al Presidente (Andrés Manuel López Obrador) con su política económica, el secretario de Hacienda (Arturo Herrera) con su política fiscal; y el Banco de México con su política monetaria y financiera, que se pongan de acuerdo y digan hacia dónde vamos", afirmó Capistrán.
Ante miembros de la Asociación Nacional de Empresarios Independientes (ANEI), dijo que México está "tan mal" que más que una recomendación de cómo mover el gasto y las tasas de interés, primero se les pide que tenga haya un diálogo entre los tres actores principales para que México pueda superar la crisis por COVID-19.
"Traten de hacer algo juntos, porque si uno jala para un lado y otro para el otro, sólo nos están hundiendo más. De que nos están hundiendo más es claro, porque la caída es más del doble que otras económicas por el mismo choque. Es de escándalo", aseveró.
Bank of America Securities estimó que México cierre este año con una contracción de su Producto Interno Bruto (PIB) de -9.5 por ciento; mientras que para 2021 el resultado será un rebote de 2.5 por ciento.
Respecto a los factores que impulsarán la economía en 2021 señaló que será la respuesta del comercio externo, más las actividades de Estados Unidos, pues localmente no hay elementos de apoyo.
De acuerdo con Carlos Capistrán la recuperación económica a niveles de 2018 se dará hasta dentro de dos años.
Finalmente, descartó un "conflicto mayor" entre Andrés Manuel López Obrador y Joe Biden una vez que asuma la presidencia de Estados Unidos, pues ambos estarán enfocados en sus agendas domésticas. "Tal vez haya acomodos en México en temas de energía limpia y seguridad, pero nada más allá", dijo.