El año pasado, los usuarios que empeñaron artículos de oro, como alhajas y relojes recibieron hasta 30 por ciento más por la apreciación del metal, derivada de la alta demanda que generaron los mercados financieros en activos refugio, refirió Conrado Monroy Infante, gerente regional del Nacional Monte de Piedad.
El oro es considerado un activo de refugio, es decir, que se trata de una cobertura ante escenarios de alta incertidumbre en los mercados, pues protege de la depreciación del dólar, principalmente.
Datos de Investig revelan que el oro llegó a cotizar hasta en dos mil 069 dólares el 6 de agosto del año pasado, el mejor desempeño que se tenga registrado en el año de la pandemia. Ayer, el metal cerró con un valor de mil 836.8 dólares, 14.74 por ciento más que hace un año.
El 90 por ciento de los clientes de Nacional Monte de Piedad empeñó relojes y alhajas el año pasado, dinero que destinó a sobrellevar la crisis por Covid-19.
“Fue un año muy bueno para todos, y para los clientes, porque estuvo incrementado con el oro, porque sus préstamos se elevaron hasta 30 por ciento, creo que hubo un beneficio importante”, sostuvo el gerente de Nacional Monte de Piedad.
Según el simulador de Monte de Piedad, el préstamo por una joya cuyo valor original fuera de cinco mil pesos aproximadamente, la institución otorga 3,250 pesos, con 130 pesos de intereses mensuales. En cambio, para un reloj de dos mil 500 pesos, el préstamo sería de mil 500 pesos, con el pago mensual de 50 pesos de intereses.
En 2020 Nacional Monte de Piedad otorgó poco más de 7.8 millones de préstamos prendarios, con una derrama de 28 mil millones de pesos, a pesar de que, por el confinamiento impuesto por las autoridades para disminuir el contagio de coronavirus, no tuvieron temporadas altas, como el regreso a clases y las vacaciones.
Para la cuesta de enero de 2021, Conrado Monroy Infante espera que las colocaciones que realicen en el primer mes del año sean 2.0 por ciento superiores a los 859 mil préstamos, o 2.7 millones de pesos prestados en el mismo periodo del año pasado.
Sin embargo, esta cifra podría incrementarse durante el mes de febrero. La Asociación Mexicana de Empresas de Servicios Prendarios (Amespre) destacó que tradicionalmente, en el segundo mes del año es cuando se nota la “cuesta de enero”, por lo que sus transacciones pueden incrementarse hasta 10 por ciento.
“Normalmente hacemos 125 mil operaciones diarias. En febrero se puede registrar hasta 10 por ciento de aumento en éstas. En febrero de 2020 llevábamos, hasta antes de los anuncios de la pandemia, 7.5 por ciento en aumento”, dijo Joel Rodríguez, director general de la Amespre.
El directivo detalló que el mayor empeño entre las empresas prendarias afiliadas a la asociación son los artículos eléctricos, electrodomésticos y electrónicos y varios, así como instrumentos musicales y herramientas; en menor nivel motos y autos.
Cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) destacan que hay más de 10 mil 506 casas de empeño en todo el país; mientras que el estudio “El préstamo prendario en México” reveló que, en promedio, éstas otorgan más de mil préstamos diarios, por un valor promedio de mil 600 pesos.
La Amespre y Nacional Monte de Piedad no detectaron un retraso en los pagos de los usuarios que pidieron un préstamo. “No hemos detectado un cambio en los pagos, lo que quiere decir que si están utilizando los medios que les presta la institución”, refirió Monroy Infante.
