La crisis económica que arrastró la pandemia de Covid-19 forzó a la renegociación de 334 mil 253 millones de pesos en créditos de la banca, de los cuales 47 por ciento, o 157 mil 209 millones de pesos, beneficiaron a las grandes empresas, informó la Asociación de Bancos de México (ABM).
Poco más de 2 mil 080 grandes empresas, quienes en el contexto complejo del virus no han sido acreedores a ningún apoyo gubernamental, reestructuraron en total 11 mil 981 créditos a diciembre del año pasado.
La reestructuración de créditos por parte de la banca, que inició en septiembre y termina a finales de este mes, es el segundo programa de apoyo que lanzó este sector ante la emergencia sanitaria de Covid-19, ha beneficiado a 1.1 millones de clientes, a través de 1.3 millones de créditos.
El primer programa, de diferimiento capital e intereses (de marzo a julio de 2020), logró ayudar a 8.6 millones de clientes, con un monto igual a 1.1 billones de pesos. En los mismos meses, la reestructuración ha tenido menos alcance que el aplazamiento de pagos.
De los 334 mil 253 millones de pesos en créditos que se han reestructurado, 47 por ciento estuvo enfocado a las grandes empresas; seguido del hipotecario, con 79 mil 483 millones de pesos, es decir, 23.8 por ciento del total.
En tercer lugar estuvo el financiamiento a Pymes, con la reestructuración de 49 mil 512 millones de pesos (14.8 por ciento del monto de créditos); le continuó consumo, con 27 mil 620 millones de pesos; tarjeta de crédito, con 14 mil 813 millones de pesos; y el microcrédito, con cinco mil 615 millones de pesos.
Asimismo, 48 por ciento de los 334 mil millones de pesos, o sea 161 mil millones de pesos, proviene de créditos que también participaron en el programa de diferimiento; y 173 mil millones, 52 por ciento, no habían participado en el aplazamiento, pero se acogieron a la nueva iniciativa.
“La mayor parte de los clientes que se acogieron al diferimiento regresaron a sus planes de pago. Las reestructuras que hemos hecho, apoyando nuevamente a nuestros clientes, no necesariamente son sólo de aquellos que difirieron, hay otros clientes que han venido a reestructurar sus créditos y la banca en su conjunto les ha dado esa liquidez que los va a ayudar a salir adelante”, señaló Luis Niño de Rivera, presidente de la ABM.
De los clientes que escogieron el diferimiento de capital e intereses, 78 por ciento está al corriente de sus pagos; 15 por ciento se apegó a las reestructuras y solamente 6.0 por ciento está en morosidad.
El presidente de la ABM destacó que estos resultados son favorables si se compara con lo que esperaban en marzo y abril del año pasado. “Por fortuna hasta este momento, cerrando el primer mes de 2021, tenemos una situación muy favorable en la cartera de la banca”.
Una vez que termine este programa de reestructuras, explicó Niño de Rivera, la banca seguirá con la atención de la demanda de crédito, para apoyar a los sectores que más necesitan la reactivación.
CRÉDITO A LA BAJA
Por otro lado, la ABM detalló que a noviembre de 2020, el crédito del sector bancario tuvo una baja en términos reales de 4.1 por ciento, a pesar de que en ese mes se llevó a cabo El Buen Fin y que duró 12 días.
El crédito al sector privado cayó 0.9 por ciento en el penúltimo mes de 2020, el de consumo se contrajo 7.1 y el empresarial se hundió 1.6, por primera vez desde abril de 2010. Por el contrario, el financiamiento a la vivienda creció 9.1, “lo que revela que la perspectiva de largo plazo sigue siendo favorable”, concluyó.
- El dato: La ABM destacó que la banca muestra gran solidez, pues el Índice de Morosidad fue apenas de 17.4 por ciento.