Aunque estimó un crecimiento de 5.5 por ciento en el Producto Interno bruto (PIB) este año, desde una perspectiva de 3.5 por ciento, la calificadora Moody’s advirtió la persistencia de riesgos para la nota de México.
A través de un análisis, indicó que esta alza en su perspectiva se debe a la fuerte demanda estadounidense de exportaciones mexicanas y un arrastre positivo de un repunte en el crecimiento económico de México en el cuarto trimestre de 2020.
Consideró que la economía de Estados Unidos cerrará el año en 4.7 por ciento, desde 4.2 por ciento previsto anteriormente, principalmente por un estímulo fiscal esperado y una implementación más rápida de la vacuna contra Covid-19. Para 2022 espera que crezca 5.0 por ciento (antes 3.9 por ciento).
Lo anterior, ahondó Moody’s, impulsará a México a través de las exportaciones manufactureras, apuntalando el crecimiento económico en el contexto de una economía con un consumo deprimido, una contracción de la inversión y escaso gasto fiscal.
Sin embargo, destacó que el crecimiento económico de México de octubre a diciembre del PIB real alcanzó 3.1 por ciento, lo que generará una contracción para todo el año de 8.3 por ciento, un resultado mejor a lo que estimaba de 8.8 por ciento.
“El crecimiento económico en el cuarto trimestre de 2020 nos ha llevado a elevar nuestro PIB real de 2021. La previsión de crecimiento pasó a 5.5 por ciento desde 3.5 por ciento. En 2022, ahora pronosticamos un crecimiento de 2.6 por ciento a partir de 2.0 por ciento anteriormente”, apuntó.
Aclaró que si bien las tasas de crecimiento del PIB se incrementaron, la producción no alcanzará su nivel de 2019 antes de 2022, ya que la demanda interna seguirá lenta, debido a una inversión persistentemente débil (-18 por ciento en 2020) y un mercado laboral deprimido que pesa sobre el consumo.
Ante este panorama, expuso que el crecimiento económico en México mostrará una recuperación de “dos velocidades” en 2021, pues por un lado los sectores conectados a Estados Unidos se expanden a un ritmo más rápido que los impulsados por demanda.
Mientras que, por otro lado, la actividad minorista se mantiene por debajo de los niveles de 2019 y el consumo en bienes duraderos, como automóviles, es mucho menor que antes del Covid.
La agencia calificadora de riesgo también observó que habrá retrasos significativos en la distribución de la vacuna contra el coronavirus este 2021, por lo que plantearían riesgos negativos para las perspectivas económicas de México este año y en 2022.
A pesar del repunte económico que esperan este año, Moody’s reconoció que será difícil para el Gobierno federal replicar el desempeño tributario que tuvo en 2020, cuando crecieron 0.7 por ciento en términos reales. Por lo que estimó que los ingresos serán más débiles incluso que en el año previo a la pandemia.
“Si bien este tipo de medidas van a continuar, conforme pase el tiempo va a ser más difícil maximizar los rendimientos, simplemente porque hubo gente que se puso al corriente con sus impuestos. Es difícil que vaya a tener un incremento importante en la recaudación”, dijo Ariane Ortiz-Bollin, analista soberana de México en Moody’s.
- El dato: Moody’s consideró que la economía de Estados Unidos cerrará el año en 4.7 por ciento, desde 4.2 por ciento previsto anteriormente, lo que impulsará a México.
PIB per cápita se recuperará hasta 2025, dice el BM
El Banco Mundial estimó que México recuperará su Producto Interno Bruto (PIB) per cápita hasta 2025 ante la ausencia de una reforma fiscal y el lento avance del plan de inmunización que depende, principalemente, de las vacunas que oferten las farmacéuticas.
Pablo Saavedra, director del Banco Mundial para México, indicó que esta medida es la más importante, porque define el desarrollo de un país a largo plazo, pues tiene que ver con la economía de las personas.
Destacó que el plan de vacunación contra Covid-19 será relevante en los resultados económicos del país para este año, previsto por el Banco Mundial de 3.7 por ciento este 2021 y 2.6 por ciento para 2022; además de una reforma fiscal.
“Desde el Banco Mundial creemos que hay posibilidad de hacer una reforma impositiva que genere los ingresos que se necesitan en el corto plazo; misma que no afecte al país ni la competitividad”, afirmó el directivo.