Entre 6.0 y 7.0 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) podrían costar las indemnizaciones a las empresas que resulten afectadas por la recién aprobada reforma a la Ley de la Industria Eléctrica, estimó José Luis de la Cruz, presidente de la Comisión de Estudios Económicos de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).
Durante la mesa de reflexión sobre la Ley de la Industria Eléctrica, el analista comentó que esta cifra es importante si se toma de referencia que México aún se encuentra en una recesión económica, por lo que las finanzas públicas difícilmente podrían enfrentar una situación de esa magnitud.
Esto luego de que Regulo Salinas, presidente de la Comisión de Energía de la Concamin, advirtiera que el Gobierno debe indemnizar a las empresas que se vean afectadas por la iniciativa que hoy entró en vigor.
Explicó que en primera instancia se habla de inversión por 40 mil millones de dólares, pero la experiencia de estos arbitrajes es que el Gobierno debe pagar lo que dejen de recibir las firmas, además de que las sentencias son de alrededor de 80 por ciento más de lo que se destinó a un proyecto originalmente.
“Entonces si la inversión fue de 40 mil millones de dólares, la sentencias serían por el orden de los 70 mil millones de dólares para aquellos que se sujetan a este tipo de arbitrajes”, aseveró Regulo Salinas.
Para el experto, el Gobierno hizo todo lo contrario que deberían hacer con la reforma, pues para aumentar la seguridad energética son necesarios más generadores; por lo que en caso de que se tengan fallas, el margen de maniobra será muy reducida.
Si hubiera un acuerdo con las empresas se podría promover un cambio legislativo. Es mejor un mal acuerdo que un buen pleito y más en este casoClaus Von Wobeser<br>Presidente del ICC
Afirmó que el único ganador con la iniciativa es Petróleos Mexicanos (Pemex), ya que podrá desplazar el combustible que está generando en las refinerías.
“Lo que se tiene que dar cuenta la gente es que es una realidad que la electricidad va a ser más cara y aquí no es como en otro tipo de decisiones que dices “bueno, le quito a este para darle a este”. Aquí es quemar literalmente el dinero”, subrayó.
CIERRAN SECTOR ENERGÉTICO, DEBEN ABRIR OTRO
El Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y el Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP) le prohíben al país hacer este tipo de reformas que atentan contra contratos previamente establecidos; por lo que si cierra el sector energético, debe abrir otro para compensar, dijo Regulo Salinas.
Ya que lo que hicieron fue poner en Ley cosas que ya rechazaron las Cortes, habrán casos donde los jueces ya le dieron la razón a los consumidores”Régulo Salinas <br>Presidente de la Comisión de Energía <br>de Concamin
“Si México decide cerrar el sector energético le tiene que abrir otros sectores que le compense a Estados Unidos y Canadá el cierre de este sector y será difícil que haya otro sector del tamaño del energético. Hay seis meses para llegar a un acuerdo”, apuntó.
AMPAROS INMEDIATOS
Con la entrada en vigor el día de hoy de la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica, Regulo Salinas indicó que hay dos acciones que se están generando: un grupo de senadores de oposición van a presentar una acción de inconstitucionalidad en la Suprema Corte; la segunda es el amparo de los privados, mismos que se prepararon desde antes de su aprobación.
“Entiendo que ya hay una buena cantidad de empresas que ya tienen armados los amparos y que probablemente los van a empezar a presentar el día de hoy. Aquí no es muy difícil, lo que hicieron fue poner en Ley muchas de las cosas que ya rechazaron las Cortes; entonces los agravios que se van a presentar, 90 por ciento los van a tomar de aquellos casos donde los jueces ya le dieron la razón a los consumidores que era ilegal lo que se estaba haciendo”.
En una primera cuantificación, para el país serían afectaciones del 6.0 o 7.0% del PIB, donde las finanzas públicas difícilmente podrían enfrentar esta situación”José Luis de la Cruz<br>Concamin
Finalmente, los expertos de Concamin aseguraron que los verdaderos impactos de la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica se verán en dos o tres años, pues “en realidad la iniciativa no tiene nada de bueno”.
