Carlos Salazar Lomelín

Ve CCE sin justificación a Dos Bocas

Desde el punto de vista económico es justificable hacer un gasto público para crear ingresos o renta, porque al final lo que se busca es que se fomente la productividad

Carlos Salazar, presidente del CCE, y Enoch Castellanos, presidente de Canacintra Foto: Especial

La eventual compra de la refinería Deer Park, en Texas, por parte del Gobierno mexicano evidenció la falta de justificación de la inversión pública en la planta de Dos Bocas, Tabasco, ya que producirán la misma cantidad de barriles, pero con una importante diferencia en el costo, dijo Carlos Salazar Lomelín, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).

El empresario opinó que desde el punto de vista económico es justificable hacer un gasto público para crear ingresos o renta, porque al final lo que se busca es que se fomente la productividad. En este sentido, la inversión tiene dos características: es la única variable de la demanda agregada que afecta el consumo y el capital.

Comentó que si bien la construcción de la refinería de Dos Bocas tiene un impacto positivo en el empleo en Tabasco e influyó para que el Producto Interno Bruto (PIB) estatal creciera 1.9 por ciento anual al cierre de 2020, a largo plazo son cuestionables estos beneficios.

La posible adquisición de Deer Park costará al Gobierno de México 596 millones de dólares, mientras que la refinería de Dos Bocas, uno de los megaproyectos de la actual administración, requiere una inversión de más de ocho mil millones de dólares, casi 14 veces más capital.

“La refinería de Deer Park producirá 364 mil barriles, la misma cantidad que supuestamente va a producir Dos Bocas, y costó 600 millones de dólares. Se tendría que justificar la diferencia por un impacto en la demanda agregada y creo que no se justifica”, aseveró Salazar Lomelín.

Petróleos Mexicanos (Pemex) propuso a Shell comprar el 50 por ciento de las acciones que tiene sobre la planta Deer Park, en donde es socio con el resto de los títulos. El Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que esta transacción permitirá avanzar en su meta de autosuficiencia energética hacia 2023.

Rocío Nahle, secretaria de Energía, aclaró que, al tener el control de la refinería, la gasolina que se produzca será de Pemex y tendrá ganancias con la planta, mientras que en años pasados todo lo reinvertían.

“Fue una muy buena oportunidad y un buen movimiento de Pemex. Hay refineros que se van a quedar allá, pero esos detalles los darán en la mañanera del miércoles. Fue una muy buena estrategia y muy bien cuidado. Es muy positivo para México”, agregó en entrevista radiofónica.

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