En el primer cuatrimestre del año, el flujo de recursos por concepto de remesas que captó el país sumó 14 mil 663.06 millones de dólares una cifra no vista nunca antes, con un alza de 19.1 por ciento, el mejor crecimiento registrado desde el mismo periodo de 2006, cuando tuvo un aumento de 25.1 por ciento, de acuerdo con información del Banco de México (Banxico).
De acuerdo con un análisis de Grupo Financiero Banorte, este resultado, además de estar basado en el sorpresivo rebote de las remesas en abril de este año, responde al impulso de la economía de Estados Unidos, derivado de los estímulos que ayudaron a las familias de este país; incluso, dijo que podría haber un efecto de las transferencias directas de mil 400 dólares aprobadas en marzo al haberse rezagado la distribución a algunas personas.
“La extensión a los beneficios por desempleo también pudo haber actuado como una fuente adicional de ingresos, a pesar de algunos cuestionamientos de que esto podría estar afectando el dinamismo del mercado laboral”, expresó el documento elaborado por Juan Carlos Alderete, director de análisis económico, y Francisco Flores, subdirector de economía nacional de Banorte.
El envío de remesas estuvo sustentado por las transferencias electrónicas. De enero a abril se recibieron 14 mil 537.31 millones de dólares, a través de 40.4 millones de operaciones, con un monto promedio de 361 dólares.
Tan sólo en abril, las remesas que recibió el país por parte de migrantes que radican en otra nación, especialmente en Estados Unidos, se ubicó en cuatro mil 047.6 millones de dólares. Esto representó un incremento de 39.1 por ciento anual y el mejor resultado desde el cuarto mes de 2003.
Además, fue el segundo mes al hilo que supera la barrera de los cuatro mil millones de dólares, según Banxico, ya que en marzo pasado se captaron cuatro mil 157 millones de dólares, el monto más alto del que se tenga registro.
El economista sénior de BBVA México, Juan José Li Ng, indicó que los mayores flujos mensuales de estos recursos se han presentado en los últimos dos años, entre 2020 y 2021.
Además coincidió que entre las razones que explican este crecimiento de las remesas, se encuentra la relativa rápida recuperación de la economía de Estados Unidos, país de origen de cerca de 95 por ciento de las remesas que recibe el país.
“La ‘escasez’ para llenar puestos de trabajo que se encuentran disponibles puede llevar a que las autoridades migratorias y los empleadores en ese país sean más laxos al momento de contratar fuerza de trabajo migrante. Estas razones, combinadas con la fuerte disparidad salarial entre Estados Unidos y México, pudieron haber favorecido el empleo y los ingresos de los migrantes mexicanos en ese país”, consideró.
Sin embargo, Gabriela Siller, directora de análisis económico-financiero de Banco Base, dijo que otra explicación detrás del crecimiento anual de las remesas en abril es la baja base de comparación, pues en el mismo mes del 2020 se contrajeron 2.04 por ciento año contra año y 28.07 por ciento respecto a marzo, por el comienzo de la primera ola de casos de coronavirus.
Recordó que a partir de mayo del 2020, las remesas volvieron a crecer a tasa anual y no se han observado disminuciones desde entonces. “Hacia adelante es probable que se siga observando un crecimiento de las remesas, debido a la recuperación del mercado laboral en Estados Unidos; mientras que en México va más lento”.
Los analistas de Banorte estimaron que las remesas podrían crecer alrededor de 10 por ciento este año, con un total cercano a los 45 mil millones de dólares, con lo que continuarán apoyando al consumo de las familias y es uno de los factores que impulsarán el crecimiento de nuestro país el resto del año.
BBVA México agregó que, de acuerdo con las proyecciones realizadas por el Banco Mundial, se estima que América Latina y el Caribe será la región con mayor dinamismo para la recepción de las remesas en 2021, con un crecimiento estimado de 4.9 por ciento, con 108 mil millones de dólares.
- El dato: Banco Base detalló que en el acumulado de 12 meses el resultado de las remesas se ubicó en un nuevo máximo histórico de 42 mil 957.08 millones de dólares.