Los precios del petróleo caían este lunes, ya que las preocupaciones sobre la desaceleración del crecimiento mundial contrarrestaban la perspectiva de un ajuste del suministro tras el estancamiento de las conversaciones entre productores clave para elevar el bombeo en los próximos meses.
El petróleo Brent para septiembre bajaba 97 centavos, o 1.27 por ciento, a 74.61 dólares el barril, mientras que el West Texas Intermediate en Estados Unidos para agosto (WTI) cedía 1.02 dólares, o 1.38 por ciento, a 73.54 dólares el barril.
Ambos crudos referenciales perdieron cerca de 1.0 por ciento la semana pasada, pero no están lejos de los máximos tocados en octubre de 2018.
La propagación de las variantes del coronavirus y el acceso desigual a las vacunas amenaza la recuperación económica mundial, advirtieron los ministros de Finanzas del Grupo de los Veinte (G20) el sábado.
"Los operadores se están volviendo a centrar en la propagación de la pandemia del COVID-19 y en las preocupaciones mundiales por la expansión de las nuevas variantes, lo que está presionando a los precios, pese al ajuste del suministro petrolero a nivel mundial", dijo Louise Dickson, analista de Rystad Energy.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados, un grupo conocido como OPEP+, abandonaron la semana pasada sus negociaciones sobre un acuerdo de producción, que incluía bombear más crudo a partir de agosto, tras una disputa entre Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos sobre cómo extender el pacto.
Aunque el fracaso de la reunión implica que habrá menos crudo en el corto plazo, los analistas creen que a largo plazo aumenta la posibilidad de que los productores abandonen el acuerdo y bombeen a voluntad.