La sesión bursátil del lunes se vio afectada por el nerviosismo que genera la cepa Delta de Covid-19, la cual se ha caracterizado por ser más contagiosa que el virus original. Por ello, las bolsas de valores del mundo terminaron la jornada con caídas considerables, hasta de 3.3 por ciento.
En el mercado local, el Índice de Precios y Cotizaciones (S&P/BMV IPC) de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) cerró en 49 mil 096.47 puntos, una contracción de 2.1 por ciento, el peor resultado observado desde finales de mayo, cuando cayó hasta los 48 mil puntos; aunque el volumen de títulos negociados se ubicó en 132.9 millones, la pérdida diaria más pronunciada desde el 29 de enero.
Por su parte, el FTSE BIVA de la Bolsa Institucional de Valores terminó la sesión con un resultado similar al IPC, con una pérdida de 2.11 por ciento, con mil 007 puntos, el nivel más bajo del que se tenga registro desde el 26 de mayo pasado, cuando apenas registró mil 006 puntos. Con ello, ligó dos jornadas negativas.
En México, las autoridades sanitarias confirmaron que se atraviesa la tercera ola de contagios de Covid-19, en medio de la jornada de vacunación contra el virus que ha beneficiado a más de 54 millones de mexicanos, pero se contabilizan dos millones 664 mil 444 casos confirmados.
Al respecto, Gabriela Siller, directora de Análisis Económico-Financiero de Banco Base, expuso que los contagios de coronavirus a nivel global muestran un incremento de 140 por ciento en los últimos 14 días; mientras que las muertes han avanzado 33 por ciento en el mismo periodo. Abundó en que hay mayor riesgo para las economías con bajos niveles de vacunación, pues se podrían imponer nuevas medidas de confinamiento.
“El nerviosismo en el mercado bursátil se da ante la expectativa de que la nueva ola de contagios, impulsada por la variante Delta, frene la recuperación económica. El nerviosismo elevó la demanda por activos libres de riesgo, haciendo que la tasa de los bonos del Tesoro a 10 años disminuyera a 1.19 por ciento”, ahondó la experta.
En las bolsas del mundo los resultados también fueron a la baja. En Wall Street el promedio industrial Dow Jones cayó 2.09 por ciento, a 33 mil 962.04; el S&P 500 perdió 1.59 por ciento, a cuatro mil 258.49; y el NASDAQ bajó 1.06 por ciento, a 14 mil 274.98 puntos, detalló Reuters.
El índice S&P/TSX en la bolsa de Canadá cayó 1.3 por ciento, la reducción más pronunciada desde febrero pasado; el indicador Bovespa de Brasil también se contrajo 1.24 por ciento, con 124 mil 395 puntos, el peor resultado desde finales de mayo; asimismo ocurrió con el mercado de Colombia, que cedió 2.7 por ciento.
Los indicadores de Alemania, Reino Unido, España e Italia también se vieron afectados al retroceder 2.6 por ciento, 2.3 por ciento, 2.4 por ciento y 3.3 por ciento, respectivamente; lo que implicó observar niveles no vistos desde hace tres meses.
Por su parte, el índice Nikkei 225 tuvo una menor depreciación de 1.25 por ciento y el Hang Seng de Hong Kong, cayó 2.2 por ciento.
Desaceleran precios del crudo
El temor por los efectos de la cepa Delta en el mundo también golpearon a los precios del petróleo. El crudo Brent cedió 6.75 por ciento, a 68.62 dólares el barril; mientras que el WTI de EU perdió 7.51 por ciento, para llegar 66.41 dólares el barril.
En consecuencia, la Mezcla Mexicana de exportación bajó a 63.13 dólares, una baja de 6.9 por ciento respecto a su cierre previo. Con ello, retrocedió a niveles no vistos desde finales de mayo.
Este escenario se da después de que los ministros de la OPEP+ acordaron incrementar el suministro petrolero desde agosto para enfriar los petroprecios, que tocaron su máximo en más de dos años.
Peso también resiente efectos de la variante
El tipo de cambio cerró en 20.8 pesos por dólar al cierre de la sesión del día de ayer, lo que implicó una depreciación de la moneda mexicana de 1.04 por ciento debido a la inquietud que generó entre los inversionistas la alza en contagios por la cepa Delta de Covid-19.
De acuerdo con Reuters, el dólar escaló a un máximo de más de tres meses ante una canasta de monedas, pero retrocedió ante la apreciación del yen y el franco. El billete verde se mantuvo firme ante monedas más sensibles al riesgo, como los dólares de Canadá, Australia y Nueva Zelanda.
Edward Moya, analista de OANDA, empresa dedicada al análisis de divisas, señaló que las preocupaciones sobre la variante Delta están desencadenando interés por activos seguros, lo cual es bueno para el dólar y para el yen.
“La propagación de la variante Delta es un recordatorio de que es probable que todos tengamos que aprender a vivir con el Covid-19 a largo plazo”, dijo Neil Shearing, economista jefe de Capital Economics.
Otro factor que impulsó al billete verde fue la probabilidad de que se vuelvan a incrementar las tensiones entre China y EU, luego de que éste último y el Reino Unido, atribuyeron formalmente el hackeo de Microsoft Exchange, a afiliados del gobierno chino.