El sector asegurador ya empieza a mostrar signos de recuperación tras el impacto de la pandemia de COVID-19, con un crecimiento de 6.6 por ciento en el segundo trimestre de 2021 respecto al mismo periodo del año pasado, destacó la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF).
El presidente de la CNSF, Ricardo Ochoa, refirió que tras haber crecido 3.2 y 7.9 por ciento en 2018 y 2019 respectivamente, el sector asegurador en México se contrajo 2.9 por ciento el año pasado, pero ya muestra signos de recuperación de 6.6 por ciento entre abril y junio de este 2021, por lo que se espera "que se vaya consolidando en lo que resta del año”.
Durante su participación en el webinar “El mercado asegurador Latinoamericano en 2020", organizado por Mapfre, precisó que, a pesar de esta recuperación, se mantienen riesgos generados por la pandemia, como el aumento de la siniestralidad, es decir, la frecuencia con la que se registren incidentes cubiertos por seguros.
Apuntó que la siniestralidad creció 18.6 por ciento en el segundo trimestre de 2021, impulsada principalmente por los aumentos en los seguros de Vida y Gastos Médicos, de 28.4 y 24.3 por ciento, respectivamente.
“La siniestralidad va a seguir tendiendo ligeros crecimientos y en algún momento se va a detener la tasa de crecimiento, pero a niveles extraordinariamente altos, sobre todo si se comparan con años anteriores”, agregó.
Pese a ello, Ochoa resaltó que la pandemia encontró al sector asegurador en México muy sólido en sus niveles de solvencia, capitalización y liquidez, lo que le ha permitido enfrentar de manera oportuna sus obligaciones.
¿Cuál es el estado del mercado asegurador en Latinoamérica?
Por otra parte, MAPFRE informó que el mercado asegurador en Latinoamérica experimentó una caída del 11.9 por ciento en primas en el año de la pandemia, hasta los 134 mil 361 millones de dólares, el 57 por ciento de las cuales se registraron en "No Vida" y el otro 43 por ciento, "En Vida".
En su informe “El mercado asegurador latinoamericano en 2020”, presentado por MAPFRE Economics y editado por Fundación MAPFRE, señaló que la contracción del sector estuvo principalmente motivada por la evolución del Negocio de Vida, por el fuerte retroceso de esta línea de negocio en Brasil, México, Chile y Colombia, así como por el efecto de la depreciación de sus monedas.
Como consecuencia de ello, la participación del mercado asegurador latinoamericano en el total mundial volvió a reducirse en el último año, para situarse en el 2.1 por ciento.
Las primas del segmento de los seguros experimentaron un fuerte retroceso del 18.7 por ciento medidas en dólares, frente al aumento de 5.1 por ciento en 2019, mientras que las primas de los seguros de No Vida tuvieron una caída del 6.1 por ciento, frente a la disminución de 1.1 por ciento en 2019.
El resultado neto agregado del mercado asegurador en América Latina se situó en nueve mil 316 millones de dólares en 2020, lo que supone un descenso del 30.1 por ciento frente al año anterior.
Estos retrocesos afectaron prácticamente a todos los grandes mercados de la región de América Latina, siendo el mercado chileno el que más cayó (15.3 por ciento), seguido de Ecuador (5.3 por ciento), México (3.1 por ciento), Perú (2.4 por ciento) y Brasil (2.0 por ciento).
Se registraron, sin embargo, algunas excepciones destacando el crecimiento de Puerto Rico de 13.7 por ciento, por el buen comportamiento de los seguros de salud.
EASZ
