La mayoría de los integrantes de la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico), cuatro de los cinco, estarían dispuestos a incrementar la tasa de referencia en 75 puntos base en la próxima reunión de política monetaria, con lo que llegaría a 7.75 por ciento, como una medida más contundente para contener la alta inflación.
De acuerdo con la minuta de la reunión de política monetaria de la Junta de Gobierno del Banxico del 12 de mayo pasado, en la cual la mayoría votó por subir en 50 puntos base la tasa de referencia a 7.00 por ciento, los comentarios sugieren que cuatro de cinco miembros están dispuestos a discutir mayores alzas en la sesión del 23 de junio próximo.
El documento recuerda que, en la pasada reunión, el único voto disidente fue el de la subgobernadora del Banxico, Irene Espinosa, quien voto a favor de incrementar la tasa en 75 puntos base, lo que la hubiera llevado a un nivel de 7.25 por ciento.
“Aumentar el ritmo de ajuste de la postura monetaria a 75 puntos base es necesario para lograr la convergencia a la meta dentro del horizonte de planeación y reforzar la credibilidad en el compromiso de este Instituto Central con su mandato prioritario de mantener la estabilidad de precios”, argumentó Espinosa el 12 de mayo pasado.
Sin revelar nombre, la minuta refiere que el único miembro de la Junta de Gobierno cauteloso respecto a los movimientos en la tasa de referencia reconoce que los niveles de inflación son elevados por lo que urge tomar decisiones adecuadas para reducir la inflación.
Sin embargo, consideró que el espacio para incrementar la tasa sin afectar a la actividad económica es relativamente acotado. Por lo tanto, aseveró que es importante continuar el ciclo de alzas con prudencia y evitando un apretamiento excesivo.
Sostuvo que resulta innecesario y hasta imprudente pensar en adoptar un ritmo de alzas superior al de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, incluso estimó que hacia adelante incluso podrían darse las condiciones para comenzar a disminuir dicho diferencial, dados los sólidos fundamentos macroeconómicos, el desempeño favorable del peso y la posición monetaria relativa.
En cambio, los cuatro integrantes restantes de la Junta de Gobierno dejaron abierta la posibilidad de discutir y, en su caso, votar por un incremento de 75 puntos base en la tasa de referencia del banco central.
Según la minuta, otro miembro de la Junta de Gobierno afirmó que hasta el momento los incrementos en la tasa de referencia sólo han conseguido compensar el aumento de las expectativas de inflación, por lo que es necesario actuar de manera decidida para garantizar que regrese hacia su meta en el horizonte de pronóstico.
Uno más estimó que incrementar la tasa 75 puntos base sería un mensaje más fuerte del compromiso con el objetivo prioritario de inflación de 3.0 por ciento. “Esta medida disiparía aún más cualquier duda sobre la autonomía y refrendaría la obligación moral con el segmento más vulnerable de la población”, agregó.
Otro integrante de la Junta de Gobierno del Banxico afirmó que “es momento de aumentar el ritmo de ajuste de la postura monetaria a 75 puntos base”, y sostuvo que una sorpresa hacia el lado de la prudencia -con un alza mayor- no es necesariamente una mala noticia, sino que muestra un banco central cuya prioridad es el control de la inflación.
El último miembro argumentó que es indispensable continuar ajustando la postura monetaria en México, para que las expectativas de inflación se mantengan ancladas y que, en consecuencia, el proceso de formación de precios sea consistente con el objetivo.
FGR