El Fondo Monetario Internacional (FMI) recortó el pasado viernes su pronóstico de crecimiento económico para Estados Unidos, y reconoció que ese país tendrá dificultades para evitar la recesión debido al endurecimiento de las condiciones financieras globales.
Lo anterior debido, en parte, a los incrementos en la tasa de interés por la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) como parte de sus esfuerzos por frenar la inflación que continúa en ascenso.
Durante la presentación del informe sobre el “Artículo IV”, que repasa la situación económica de Estados Unidos, la directora del FMI, Kristalina Georgieva, comentó que "el camino para evitar la recesión es angosto", mientras estiman que la economía de ese país se desacelere en 2022 y 2023.
"Reducir la inflación y proporcionar estabilidad de precios protegerá los ingresos reales y ayudará a sostener el crecimiento a mediano plazo. No obstante, existen riesgos importantes de que los vientos en contra actuales sean más persistentes de lo esperado, o que la economía se vea afectada por otro shock negativo, lo que convertiría la desaceleración en una recesión de corta duración", aclaró el FMI.
El Fondo prevé que el Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos crezca un 2.9 por ciento en 2022, algo que provocará estragos en el crecimiento mundial.
Para 2023, el pronóstico del FMI sobre el crecimiento económico de EU se redujo a 1.7 por ciento, mientras espera que alcance un mínimo de 0.8 por ciento para 2024.
Cabe recordar que en octubre del año pasado el FMI pronosticó un crecimiento de EU del 5.2 por ciento para 2022; no obstante, la pandemia provocada por el virus de COVID-19, además de factores como el aumento en los precios del combustible y alimentos, en parte provocado por la invasión de Rusia a Ucrania, elevó la inflación a máximos históricos.
“La economía continúa recuperándose de la pandemia y los impactos importantes están golpeando la economía por la invasión rusa de Ucrania y los cierres en China”, dijo Kristalina Georgieva. "Más impactos negativos inevitablemente harían la situación más difícil", agregó.
En tanto, el subdirector del Hemisferio Occidental del FMI, Nigel Chalk, se mostró más optimista y comentó que los ahorros de EU podrían ayudar a mitigar los efectos, pues una situación más grave podría empujar al país a una recesión, aunque estiman que sería breve y superficial, con un aumento modesto del desempleo, similar a la recesión de 2001.