El Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE) estimó que el IGAE creció sólo 0.1 por ciento en octubre de 2022, desde el 0.2 por ciento previsto para septiembre pasado, dato que fue revisado al alza desde el nulo avance anticipado hace un mes, pero con lo que hilaría cuatro periodos de avance.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que, al considerar los principales grandes sectores de actividad del Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE), se calcula también un modesto avance de 0.1 por ciento para las actividades secundarias (industrias) y para las terciarias (servicios) en octubre respecto a septiembre.
El organismo reportó que, para octubre de 2022, el IOAE estima un crecimiento de 5.0 por ciento del IGAE respecto a igual mes del año pasado, su mejor desempeño desde julio de 2021 y su séptimo de avance al hilo, además superior al 4.8 por ciento anual proyectado para septiembre, que fue mejorado desde el 3.3 por ciento con información preliminar.
Para los grandes sectores de actividad del IGAE, agregó, se calcula un incremento anual de 3.5 por ciento en las actividades secundarias y de 5.6 por ciento en las terciarias.
El expresidente del Inegi, Julio Santaella, comentó que de materializarse la evolución que anticipa el IOAE, el Indicador Global de la Actividad Económica habría alcanzado en octubre de 2022 exactamente el mismo nivel que el observado en enero 2020, antes del inicio de la pandemia de COVID-19.
Grupo Financiero Banorte precisó que con la revisión de los datos de septiembre, el Producto Interno Bruto (PIB) de México del tercer trimestre se ajustaría a 0.9 por ciento, ligeramente por debajo del 1.0 por ciento de la publicación preliminar.
“En nuestra opinión, esto sigue siendo positivo dados los retos prevalecientes tanto en el frente externo como local”, precisó en un análisis.
Señaló que, tras esto y considerando el estimado para octubre, la actividad probablemente se modere en el cuarto trimestre de 2022, consistente con su visión de una mayor debilidad de la demanda de Estados Unidos ante el apretamiento monetario y con el consumo interno afectado por las presiones inflacionarias.
LRL