El Banco de México (Banxico) anticipó que las economías regionales continuarán recuperándose, pero seguirán enfrentando un contexto complejo e incierto que impone retos importantes para el crecimiento.
La directora general de Investigación Económico del Banxico, Alejandrina Salcedo Cisneros, apuntó que los retos que enfrentan las economías regionales son un debilitamiento de la economía de Estados Unidos, la pandemia y conflictos geopolíticos, la materialización de eventos climáticos adversos y condiciones de inseguridad pública.
Durante la presentación del “Reporte sobre las Economías Regionales, octubre-diciembre 2022”, consideró que para enfrentar estos retos, se requiere fomentar condiciones adecuadas para la recuperación de la inversión privada y reforzar aquellos factores que inciden en las fuentes internas de crecimiento.
En videoconferencia, destacó que en el marco del T-MEC y en el contexto de una relocalización de los procesos productivos a escala mundial, los factores que podrían apoyar el crecimiento regional son el fortalecimiento del Estado de derecho y de la seguridad pública.
Asimismo, dijo Salcedo Cisneros, avanzar en el desarrollo de los mercados financieros regionales, la construcción de proyectos de infraestructura, así como el avance en el control del Covid-19 y la recuperación del capital humano de los efectos de la pandemia.
Si bien se anticipa que la recuperación de las economías regionales continúe, estas seguirán enfrentando un contexto complejo e incierto que impone retos importantes para el crecimientoAlejandrina Salcedo, Economista en jefe del Banxico
“Estas acciones no solo apoyarían a las economías regionales para enfrentar con éxito los retos que impone un posible debilitamiento de la demanda externa, sino también podrían contribuir a un crecimiento sostenible en el largo plazo y a impulsar el desarrollo económico de todas las regiones. Ello en beneficio del bienestar de la población”, subrayó.
Por otra parte, apuntó que, en el cuarto trimestre del 2022, la actividad económica de México continuó creciendo, aunque presentó una desaceleración respecto del desempeño observado en los primeros tres trimestres del año.
En ese contexto, dijo, se estima que durante el trimestre que se reporta la actividad productiva de las regiones se haya debilitado, excepto en el sur.
Se prevé que la actividad en el norte y el centro norte haya seguido ubicándose por arriba de los niveles del primer trimestre del 2020, en tanto que en el sur presentaría uno similar a esa referencia.
Por su parte, se anticipa que la actividad del centro continúe exhibiendo una brecha respecto del nivel registrado antes del inicio de la pandemia, si bien dicha brecha seguiría reduciéndose.
La directora general de Investigación Económico del Banxico informó que directivos de empresas consultados por el instituto central consideraron que los principales riesgos a la baja para la actividad económica regional son que se deterioren los indicadores de seguridad pública.
Asimismo, que persista la inflación en niveles elevados y que continúen aumentando los costos laborales.
En tanto, los principales riesgos a la baja son que el gasto público, en particular la inversión en obras de infraestructura, sea mayor que el esperado; que se observen, tanto en el ámbito local como internacional, condiciones más favorables que incentiven una mayor inversión privada, y que se fortalezcan los niveles de seguridad pública.
Además, informó que el Banxico también consultó a representantes de empresas sobre los tres principales factores que, en su opinión, podrían obstaculizar el crecimiento económico de sus entidades federativas en los próximos seis meses.
Los mayores porcentajes en todas las regiones son los factores relacionados con la inflación, aquellos asociados con la gobernanza, las condiciones económicas internas y externas.
Por otra parte, Salcedo Cisneros mencionó que, entre el tercer y el cuarto trimestre de 2022, la inflación general disminuyó en todas las regiones del país como resultado de la reducción en la inflación no subyacente.
En todas ellas, la inflación subyacente anual, que determina la trayectoria de mediano y largo plazo para la inflación general, siguió enfrentando presiones al alza durante el cuarto trimestre de 2022, alcanzando niveles superiores a los del trimestre previo.
En lo que va de 2023, si bien parecería haber interrumpido su trayectoria al alza, continuó sin exhibir todavía una tendencia a la baja. Este desempeño siguió reflejando los efectos de los elevados costos de producción sobre los precios de diversos bienes y servicios.
En todas las regiones, la inflación no subyacente del cuarto trimestre de 2022 y de principios de 2023 fue menor a la del tercer trimestre del año pasado.