La inseguridad azota “fuertemente” a los pequeños comercios (tienditas y misceláneas) del país, lo cual genera pérdidas económicas de hasta 20 por ciento, acusó la ANPEC.
Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), dijo la situación se recrudece con la persistente inflación y las menores ventas que registra el sector.
Los delitos que sufren van desde robo hormiga, asaltos con y sin violencia, extorsión, cobro por derecho de piso y hasta la obligación de vender cigarros pirata.
Los costos que genera este fenómeno, destacó, implican aumentos de precios: “La inseguridad tiene un costo inflacionario y se le carga al consumidor, por eso las cosas no están baratas, en gran medida”.
Delincuencia se moderniza
Sobre el cobro de derecho de piso, dijo que puede ir desde 500 pesos y hasta 50 mil pesos, dependiendo el tamaño del negocio. En conferencia de prensa para presentar la edición 19 de la “Encuesta: inseguridad como factor inflacionario”, detalló que prácticamente mil 500 municipios padecen este problema de forma cada vez más notoria; es decir, dos terceras partes del país, en entidades como Ciudad de México, Estado de México, Guerrero, Puebla, Tlaxcala, Colima, Morelos, Tamaulipas, Zacatecas, Guanajuato y Baja California Sur.
“Ya sean restaurantes de marca, fonditas, tienditas, todo aquel negocio que sea exitoso y tenga flujo de efectivo es visitado por parte de las pandillas de cobro de piso, no dejan títere sin cabeza”.
Rivera expuso que el cobro de piso se convirtió en un impuesto por el derecho a trabajar que se va normalizando, “la gente termina por no respingar”, ante los temores de lo que pueda pasar. Lo que ahora se ve, dijo, es que no se conforman con 200 pesos, empiezan con 500 pesos a la quincena o al mes.
“(El crimen muestra) una mayor capacidad de inteligencia, están apostándole mucho a tener información previa, lo más robusta posible, para que las personas a las que van a cobrarles el piso se sientan realmente vulnerables; entonces, la gente termina cediendo, porque no quiere poner en riesgo la integridad de su familia (…) están pagando una protección que no es otra cosa que un chantaje o una extorsión”, señaló.
Las cifras
El presidente de la Anpec detalló que 16.73 por ciento de los negocios ha sido extorsionado por teléfono y 8.28 por ciento sufrió al menos un asalto con violencia en el último semestre; en 23.74 por ciento de los casos el robo fue únicamente de mercancías.
Además, 25.6 por ciento de estas unidades de negocio ha sido víctima de robo hormiga; 22.83 sufrió este delito más de tres veces en el último semestre.
Los encuestados dijeron que 37.78 por ciento de sus proveedores ha sido víctima de un delito al momento de surtir: “sufren la gota gorda”, dijo. De los pequeños comercios, 46.45 por ciento considera que hubo un aumento de la violencia en su colonia en los últimos cinco años.
Pese a este panorama, 56.31 por ciento no cuenta con una medida de seguridad para salvaguardar su negocio y 20.28 por ciento no realiza denuncia ante las autoridades correspondientes.
Ventas de cigarros caen hasta 30% por regulación
La comercialización de tabaco se ha visto afectada entre 20 y 30 por ciento por las restricciones que impuso el Gobierno para su comercialización en meses pasados, particularmente en el tema de exhibición en los centros de venta, señaló el representante de la Anpec.
Comentó que la industria que representa buscó imponer amparos para que se les permitiera vender este producto; sin embargo, dijo, hasta la fecha prácticamente no se ha conseguido ninguno, “porque los criterios de los jueces han sido obtusos, por decirlo de alguna manera”.
De las tres grandes compañías de cigarros que existen: Philip Morris, British American Tobacco y Japan Tobacco, ésta es la única que ha conseguido un amparo para la venta de sus productos: Camel y Winston.
“Nos hicieron llegar el amparo y son los cigarros que ahora se pueden exhibir en los centros de ventas”, dijo.
A ella se sumó Oxxo, una de las grandes tiendas de conveniencia, “pero el pequeño comercio no lo ha logrado, y la verdad estamos muy complicados con este proceso”.
Según la encuesta, 65.18 por ciento de las tienditas no está de acuerdo en esconder los cigarros en un cajón y no exhibirlos a la venta; 36.53 por ciento se ha visto afectado y 13.90 por ciento se ve afectado en más de 30 por ciento.
DAN