La inflación anual en México se desaceleró por quinto mes consecutivo a 5.06 por ciento en junio de este año, su menor nivel desde marzo del 2021, en buena medida por disminuciones en precios de energéticos y productos pecuarios, aunque resultó ligeramente por arriba de lo esperado por analistas.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que el Índice de Precios al Consumidor (INPC) aumentó 0.10 por ciento respecto al mes anterior, dato superior al 0.09 por ciento esperado por el mercado y luego de dos meses a la baja.
Refirió que los genéricos con mayores alzas en el sexto mes del año son vivienda propia con 0.29 por ciento, papa y otros tubérculos con 5.93 por ciento, loncherías, fondas, torterías y taquerías con 0.54 por ciento, naranja con 9.74 por ciento y chayote con 36.35 por ciento.
Estas fueron parcialmente contrarrestadas por las disminuciones en cas doméstico LP con 7.81 por ciento, huevo con 10.66 por ciento, pollo con 1.17 por ciento, limón con 13.98 por ciento y servicio de telefonía móvil con 1.03 por ciento.
Así, la inflación a tasa anual continúo moderando su ritmo de incremento a 5.06 por ciento en junio desde su nivel previo de 5.84 por ciento en mayo, aunque resultó por arriba del 5.04 por ciento previsto por expertos.
Con ello, la inflación se mantiene por 28 meses por arriba del objetivo del Banco de México (Banxico), de 3.0 por ciento, más/menos un punto porcentual.
Por su parte, el índice de precios subyacente, que determina la trayectoria de la inflación general en el mediano y largo plazo, registró un aumento de 0.30 por ciento mensual y de 6.89 por ciento anual desde 7.39 por ciento en mayo, hilando cinco meses consecutivos a la baja y ubicándose por debajo de 7 por ciento por primera vez desde marzo de 2022.
Al interior de la inflación subyacente todos los componentes siguieron desacelerándose. Destaca la inflación de mercancías alimenticias que, aunque siguió desacelerándose, suma 11 meses consecutivos en doble dígito, ubicándose en junio en 10.49 por ciento.
A su vez, el índice de precios no subyacente disminuyó 0.52 por ciento a tasa mensual y bajó 0.36 por ciento a tasa anual desde el alza de 1.24 por ciento, su menor nivel desde mayo del 2020, debido a la caída de 6.95 por ciento anual en los precios de los energéticos.
La directora de Análisis Económico de Grupo Financiero Base, Gabriela Siller, refirió que, en el primer semestre del año, la inflación general registra una variación mensual promedio de 0.23 por ciento y una variación anual promedio de 6.59 por ciento.
Comentó que los datos de inflación de junio muestran que las presiones inflacionarias se siguen disipando, pero continúan los riesgos al alza para los precios de las mercancías alimenticias, pues la guerra entre Rusia y Ucrania no ha terminado y el corredor de granos por el Mar Negro sigue en riesgo.
Además, el sector servicios sigue observando presiones en vivienda y educación, como consecuencia de incrementos en la masa salarial real, apuntó en un análisis.
“Debido a que la inflación se ha ubicado por varios meses debajo de la expectativa y a que las presiones inflacionarias siguen disipándose se revisa a la baja la expectativa para cierre de este año a 4.6 por ciento anual”, anunció.