Las ventas de autos ligeros durante el mes de julio aumentaron 32.6 por ciento interanual; mientras que a tasa mensual retrocedieron 2.39 por ciento, de acuerdo al avance de resultados del Registro Administrativo de la Industria Automotriz de Vehículos Ligeros (RAIAVL), del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Durante el mes pasado se vendieron en el país 110 mil 843 vehículos, el mejor registro para un mismo periodo desde el 2018. Además, la cifra es mayor en 27 mil 245 unidades con respecto a julio del 2022. Con ello se registran 15 meses consecutivos de incrementos.
Así, en el acumulado de los primeros siete meses del año se comercializaron 743 mil 930 unidades, un incremento de 23.6 por ciento con respecto al mismo periodo del 2022. Sin embargo, aún están abajo en 0.37 por ciento frente a los niveles previos a la pandemia.
El presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), Guillermo Rosales Zárate, indicó que la cifra de julio fue superior a las 105 mil 71 unidades estimadas por el propio organismo. La expectativa tuvo una diferencia porcentual de 5.2 por ciento.
“Este nivel de comercialización es superior a las ventas en similar mes del 2019, colocándose 4.5 por ciento por arriba de las 106 mil 104 unidades vendidas entonces”, indicó. Además, señaló que “los resultados positivos continúan reflejando una mejoría en el nivel de inventario y un mejor desempeño en las diversas marcas del mercado”.
Por su parte, Grupo Financiero Bx+ consideró que es probable que las ventas pierdan fuerza en el tercer y cuarto trimestre del año, por el “agotamiento” en la demanda acumulada y alto costo que registra el crédito.
Al respecto, Rosales Zárate expuso que la política monetaria para contener la inflación sí ha impactado en la comercialización de vehículos.
“Afortunadamente, la inflación ha venido disminuyendo en las últimas quincenas, pero seguiremos enfrentando una política monetaria restrictiva por parte del Banco de México”, expuso.
Ante ese escenario, estimó que será lenta la disminución de las tasas de interés en lo que resta del año, incluso, probablemente, será hasta inicios del 2024 cuando se observen reducciones graduales.
“Estamos preparándonos en todas las redes de distribuidores por las implicaciones que tiene esto –altas tasas de interés– en el financiamiento”, aseguró el presidente ejecutivo de la AMDA.
Al dar a conocer, también, el “Reporte de Financiamiento y Compradores por Estado” de la AMDA, realizado en colaboración con JATO y Urban Science, señaló que, entre enero y junio de este año, 55.3 por ciento del total de compras de automotores ligeros nuevos en México se realizó mediante un banco o una financiera de marca. Eso representó una contracción de 3.8 puntos porcentuales respecto al mismo periodo del año pasado, cuando la participación fue de 59.1 por ciento.
El financiamiento automotriz de la banca creció 11.6 por ciento en junio a tasa anual, el mayor incremento desde noviembre del 2017, luego de que la industria se vio afectada por escasez de chips y una menor demanda de unidades por el impacto del Covid-19.
fgr