En México existe un déficit de al menos 50 mil operadores de transporte de carga, en medio de la creciente ola de asaltos y violencia que sufre el sector en las carreteras del país.
Así lo da a conocer el recién nombrado director de Seguridad de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), Luis García López-Guerrero, quien señala que la falta de personal obedece a que muchos trabajadores prefieren prestar sus servicios en otras industrias o hasta mudarse de país para proteger su integridad, ante los actuales niveles de inseguridad, mientras que otros buscan opciones alternas por un tema económico.
“Nos reportan que, en muchas ocasiones, son robos con violencia, además de extorsiones y secuestros. A veces hay pérdidas de vida que impactan a las familias”, lamenta.
En entrevista con La Razón, destaca que el faltante de choferes obliga a que un número importante de unidades esté parado, lo que genera pérdidas millonarias para la industria.
Crecen delitos. Al cierre del primer semestre del año, la incidencia delictiva del fuero común y federal en contra de esta actividad aumentó 10.7 por ciento en comparación con el mismo periodo del 2022, de acuerdo con la Canacar, que cita datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública y la Fiscalía General de la República.
De enero a junio del 2019, al inicio del actual Gobierno, el número de robos al transporte de carga sumó ocho mil 841; para el mismo periodo del 2020 cayó a seis mil 678 y para 2021, a cinco mil 876, debido a la menor actividad económica derivado de la pandemia de Covid-19.
Sin embargo, una vez que se reactivó la actividad, tras pasar el peor momento de la crisis sanitaria, la incidencia delictiva nuevamente fue en ascenso. En la primera mitad del 2022, los robos a camiones de carga se incrementaron a seis mil 360, y para el mismo lapso de este 2023, a siete mil 40.
García López-Guerrero, quien fuera titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, manifestó su profunda preocupación por el incremento en robo registrado en contra del sistema de transporte pesado, debido a que algunos operadores pierden la vida, además del daño patrimonial a las familias, las empresas y la economía nacional.
“El autotransporte de carga es una actividad fundamental en el desarrollo económico del país, ya que es el principal medio de movilización de mercancías utilizado”, destaca.
Las unidades de carga trasladan alrededor de 550 millones de toneladas al año, lo que equivale a 81 por ciento del cargamento terrestre y 56 por ciento de la carga doméstica total.
El sector contribuye con 3.3 por ciento del Producto Interno Bruto del país, genera más de 500 mil empleos directos y un número mayor de forma indirecta, a través de diversas ramas económicas. Además, añade, esta actividad tiene un impacto económico y de bienestar social en seis millones de familias que dependen del sector.
Cualquier política que se quiera implementar, requiere de una cooperación conjunta entre servidores públicos y el sector privado para obtener resultados importantesLuis García López-Guerrero, Director de Seguridad de la Canacar
Nueva figura. Ante la relevancia que recobra esta industria, a inicios de julio pasado, la cámara empresarial informó de la creación e inicio de operaciones de la Dirección de Seguridad, a cargo de Luis García López-Guerrero.
El presidente de la Canacar, Miguel Ángel Martínez Millán, manifestó, en su momento, que la nueva área tiene como objetivo implementar mejores estrategias en coordinación con las autoridades federales, estatales y municipales, así como con los propios transportistas del país.
“Para nosotros, es fundamental fortalecer la seguridad en el sector del transporte de carga, porque nos preocupan mucho las consecuencias que derivan de este ilícito”, expresa.
Hay apoyo. Celebra que instituciones como la Guardia Nacional, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana y la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes den una respuesta positiva y propositiva hacia la preocupación del área que encabeza en la Canacar.
“La respuesta que hemos recibido ha sido completamente de apertura, acercamiento y de empatía con el sector para resolver estos temas” que tanto preocupan a todos, asegura.
El reto que tenemos, agrega, es trabajar con las autoridades para que esta incidencia delictiva disminuya, y que los caminos en México sean cada vez más seguros, en favor de la industria y del crecimiento económico, en general.
Al respecto, considera que para disminuir de manera notoria el robo al transporte de carga en el menor tiempo posible, es fundamental el trabajo coordinado con las autoridades de todos los niveles.
El exfuncionario confía en que, con la disposición inédita que muestran las autoridades y la cooperación del sector privado, “más temprano que tarde vamos a tener resultados importantes, que es a lo que le apostamos todos, ése es nuestro reto”.
