Crudo se vende por arriba de 87 dólares

Superpeso limita ganancias de altos precios del petróleo

Para 2023, Hacienda estima recursos menores a los aprobados en esta materia por más de 190 mil mdp; referencias internacionales cotizan hasta en 94 dólares y prevén que lleguen a 100

Plataformas de exploración y producción de Pemex en la Sonda de Campeche. Foto: Cuartoscuro

México sacará poco provecho de los altos precios internacionales que registra el petróleo en las últimas semanas, debido a la fortaleza del peso frente al dólar, a la par que es previsible mayores estímulos fiscales para evitar alzas abruptas en las gasolinas.

Ayer, la mezcla mexicana de exportación cerró en 87.64 dólares por barril, un nivel muy por arriba del previsto para este año, de 67 dólares en promedio, luego de que en meses anteriores operó por debajo de la cifra estimada por Hacienda.

Sin embargo, por el superpeso, el Gobierno recibe menos recursos por cada barril que exporta, lo cual impacta de manera importante las finanzas públicas.

Para 2023, el Congreso aprobó recursos derivados de la renta petrolera de 1.32 billones de pesos; sin embargo, en los Criterios Generales de Política Económica 2024, el Gobierno redujo su expectativa a 1.13 billones. Esto implica una disminución de 190 mil 351 millones de pesos con respecto a lo proyectado.

La Secretaría de Hacienda explicó que, en 2023, factores externos como la apreciación del peso y los menores precios que se vieron meses atrás explican, en gran medida, la caída de los ingresos petroleros del sector público.

Por ello, añadió, en el acumulado de enero a julio los recursos registraron una desviación con respecto al programa de 179 mil 400 millones de pesos y una reducción de 22.5 por ciento real anual.

“Para el cierre del año se estima que los ingresos petroleros se ubiquen por abajo del programa en un monto equivalente a 3.5 por ciento del PIB. Esta reducción se debe, principalmente, a un tipo de cambio más apreciado”, expuso la dependencia que encabeza Rogelio Ramírez de la O..

Desde mediados de julio, el crudo opera por arriba de 70 dólares, y para principios de septiembre subió a más de 80 dólares. En lo que va del año, el precio promedio es de 69.20 dólares. Algunos especialistas hablan de que el petróleo podría tocar los 100 dólares en las siguientes semanas.

Lo anterior, luego de que ciertas mezclas ya superaron ese nivel. El lunes, el precio directo del crudo nigeriano Qua Iboe superó los 100 dólares, según datos de LSEG. En tanto, el crudo malasio Tapis alcanzó los 101.30 dólares la semana pasada, de acuerdo con un informe de Bjarne Schieldrop, analista del banco sueco SEB, destacó Reuters.

En lo que va del año, el peso mexicano se aprecia 12.5 por ciento, luego de que el tipo de cambio cerró ayer en 17.06 unidades.

Factores que favorecen

Ayer, el WTI cerró en 91.20 dólares, tras tocar los 93.74 dólares, un máximo desde noviembre. En tanto, el Brent finalizó en 94.34 dólares, según reportó la agencia de información. Ambas mezclas son las de referencia internacional.

“Las presiones al alza para el precio del petróleo se deben a la expectativa de que la oferta de la OPEP y sus aliados (OPEP+) seguirá limitada. Cabe recordar que los gobiernos de Arabia Saudita y Rusia extendieron hasta diciembre los recortes de suministro combinados de 1.3 millones de barriles diarios”, señaló Gabriela Siller, economista en jefe de Banco Base.

Asimismo, los riesgos de una menor oferta se elevaron, ya que, se dice que el Gobierno de Rusia está considerando imponer aranceles de exportación a todo tipo de productos petrolíferos de 250 dólares por tonelada métrica, desde octubre hasta junio del 2024.

Por su parte, la Administración de Información Energética de Estados Unidos publicó que la producción de petróleo de las principales regiones shale se podría reducir a 9.39 millones de barriles diarios, lo que sería la tercera caída mensual. Mientras tanto, se espera que los inventarios de petróleo hayan caído 2.7 millones de barriles la semana pasada.

Economía crece 0.2% en agosto, estima Inegi

La economía mexicana creció 0.2 por ciento en agosto, con respecto al mes previo, según estimaciones preliminares del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

El Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE), que refleja las primeras proyecciones del periodo, muestra una ligera desaceleración, luego de que en julio subió 0.3 por ciento. Sin embargo, acumula cinco meses de crecimiento consecutivos. “El dato encaja con el patrón de desaceleración que se ha anticipado para la economía local desde hace algunos meses. No obstante, el ritmo de avance sigue siendo aceptable y la acumulación de resultados positivos es contundente por si sola”, señaló Marcos Arias, analista de Monex.

Al considerar los principales grandes sectores de actividad de la economía, calcula que tanto las actividades secundarias (industrias) como las terciarias (servicios) aumentaron 0.2 por ciento en agosto respecto a julio del 2023.

El instituto reportó que, para agosto del 2023, el IOAE estima un crecimiento económico anual de 3.4 por ciento, con una moderación en su ritmo de expansión respecto al aumento de 3.6 por ciento calculado para julio y, con ello, sumaría 28 meses al alza a tasa anual.

Con información de Ivonne Martínez