Mayor demanda es la principal causa

Rentas de vivienda se disparan hasta 28% tras crisis sanitaria

Para éste y el próximo año se espera un aumento en los precios de entre 7 y 8 por ciento, estima Tuhabi; en la CDMX, Estado de México y Nuevo León están las propiedades más costosas para arrendar

Rentas de vivienda se disparan hasta 28% tras crisis sanitaria. Foto: Especial

La renta de vivienda en zonas urbanas del país se disparó hasta 28.4 por ciento del 2020, cuando estalló la pandemia de Covid-19, a la fecha, señaló el vicepresidente de Data y Analítica de Tuhabi, Juan Sebastián Sokoloff.

El encarecimiento obedeció a una mayor demanda de espacios habitacionales, dado que muchas personas decidieron cambiar de casa aprovechando el trabajo remoto. “La oferta no ha crecido al mismo ritmo y esto se observa por el aumento generalizado de los precios de renta”, expuso,

En entrevista con La Razón, el directivo explicó que la situación implica un aumento anual promedio de entre 7 y 8 por ciento, una cifra que se espera se repita para 2024.

Lo anterior, en medio de la recuperación de la economía, que impulsa la demanda de propiedades en renta y mayores ingresos familiares. “Estas dos cosas tienden a llevar a que los precios de las rentas suban, ya que los dueños de vivienda se encontrarán en un mercado dinámico, con alta demanda, que les permitirá rentar de manera rápida y a buenos precios”, destacó.

Con base en información de Realty World México, en la capital del país se encuentran las rentas más altas, con un costo máximo promedio de 53 mil pesos para casa habitación y de 40 mil 300 pesos para departamento.

Le sigue Estado de México, con un precio máximo de renta de 40 mil pesos para casa y de 40 mil 383 pesos para departamento. En tercer lugar se encuentra Nuevo León, con un precio máximo de renta de 35 mil 737 pesos para casa y de 28 mil 864 pesos para un departamento. En la lista sigue Yucatán, con precio máximo de renta de 33 mil 501 pesos para casa y de 25 mil 57 pesos para un departamento.

CDMX, epicentro. Para el caso particular de la Ciudad de México, tan sólo durante el primer semestre del año, el incremento anual de las rentas es de 13.5 por ciento, según Inmuebles24. Al respecto, el vicepresidente de Data y Analítica de Tuhabi destacó que en esta entidad, el nivel de los hogares en renta está llegando a 50 por ciento, contra 30 por ciento de hace 25 años. En la medida que la oferta de vivienda nueva disminuya, y -a la par- el costo aumente, “es posible que este número se mueva hacia arriba”. Es decir, que haya más hogares que se vean forzados a vivir en una vivienda rentada, porque no tienen recursos para adquirir una propiedad o porque no tienen acceso a un crédito, “y no necesariamente porque así lo deseen”.

Por alcaldías, el mayor aumento está en Benito Juárez, con 14.8 por ciento; Miguel Hidalgo, con 14.2 por ciento y Álvaro Obregón, con 12.7 por ciento.

Las causas. Según las “Estadísticas a propósito del Día Nacional de la Vivienda”, del Inegi, 16.4 por ciento de la población habita una vivienda rentada, lo que representa 5.8 millones de unidades totales.

La causa principal para rentar, en 61 por ciento de los casos, es por cuestiones económicas, como no tener acceso a un crédito hipotecario y carecer de recursos para cubrir una hipoteca.

Otro 30.6 por ciento lo hizo por motivos personales, ya que no tiene interés de comprar una vivienda y da prioridad a viajes, estudios o negocio.

Gráfico

Ven mayor solicitud por el nearshoring

Ante la relocalización de las cadenas globales, el llamado nearshoring, y las tendencias de trabajo remoto, se puede esperar que el tránsito de personal extranjero contratado para realizar actividades en el país de manera temporal aumente, de acuerdo con Azucena Cortés, socia de Servicios de Movilidad de KPMG.

Esta situación impulsará la dinámica económica del país, particularmente en rubros como el sector inmobiliario. Si bien la parte industrial es la que verá las mayores ventajas, el habitacional también tendrá ganancias de estos movimientos, de acuerdo con analistas.

Sin embargo, señalan que será un reto para la industria de vivienda, considerando que la producción viene cayendo, mientras que la oferta en renta es insuficiente.

Este fenómeno ya se refleja en una mayor demanda de espacios de uso industrial. Tan sólo en 2022 se construyeron 5.6 millones de metros cuadrados (60.6 millones de pies cuadrados) de área bruta rentable, 70 por ciento más que el año anterior, según cifras de la empresa de inteligencia inmobiliaria Datoz. Se trata del incremento más alto desde que tiene registro.