Se pide que los empleados y empleadas tengan buen desempeño, buenos resultados, que sean colaborativos, que desarrollen estrategias... Sin embargo, la motivación que reciben los y las trabajadoras, en muchas ocasiones no es proporcional a lo que ellos hacen en sus labores diarias.
Aquí es en donde entra el llamado salario emocional, el cual se considera fundamental para un buen desempeño de los trabajadores en las empresas, de acuerdo a diversos estudios. Digamos que se considera incluso hasta un tipo de prestación que evidentemente no está en el contrato, pero que mantiene contento a los empleados. Sigue leyendo para que veas de qué se trata todo esto.
¿Qué es el salario emocional?
El salario emocional es un conjunto de beneficios no económicos que provocan que los y las empleadas en una empresa se sientan cómodos; trayendo como resultado el que su salud mental mejore, pero que también se sientan valorados y tomados en cuenta.
Lo consideran en varios lugares de América Latina como una retribución que está a la altura de lo económico. Ahí te va, porque abarca beneficios no económicos que también son importantes para que el empleado se sienta parte de la empresa: satisface necesidades personales; de calidad de vida; el bienestar físico; el bienestar emocional y más aspectos.
¿Cuáles son los beneficios del salario emocional?
Lo que se llama como salario emocional, va ejemplificado en acciones como las siguientes:
- Flexibilidad horaria, es decir, no tener horarios estrictos
- Hacer home office y organizar tu tiempo de acuerdo a tus obligaciones y necesidades
- Medidas de conciliación que tienen que ver con beneficios como el transporte, la comida, la actividad física.
- Los planes de formación y promoción donde la empresa te brinda la posibilidad de capacitarte y trabajes en equipo.
- Impulso del bienestar, donde se fomenta la buena alimentación y el tener una vida en movimiento.
¿Crees que en algún momento se llegue a aplicar en México?
