En el presupuesto para el año próximo, 17 por ciento de la inversión federal estaría siendo ejecutada por ramos militares, lo que significa la mayor proporción en la historia, cuando en 2018 su participación sólo era 3 por ciento, de acuerdo con la organización México Evalúa.
El investigador del Programa de Gasto de México Evalúa, Carlos Velázquez, precisó que la Secretaría de la Defensa (Sedena) ejercerá 14 por ciento y la Secretaría de Marina, 3 por ciento, pero si se considera a la Guardia Nacional (GN), entonces los entes militares se encargarán del 20 por ciento de la inversión federal durante el año próximo.
En rueda de prensa sobre el paquete económico para 2024, apuntó que uno de los argumentos que el Gobierno federal ha dado para esta concentración de los recursos en los ramos militares ha sido la búsqueda por optimizar o hacer más eficiente el uso de los recursos públicos en el momento de hacer o construir obras de inversión.
Sin embargo, refirió, en el caso del Tren Maya, a cargo de la Sedena, con el presupuesto propuesto para 2024 se le estarían dando un gasto adicional de 120 mil millones de pesos, con lo cual el costo total de la obra ascendería a 511 mil millones de pesos.
Expuso que esto representa un sobrecosto de 317 mil millones de pesos o de 164 por ciento, considerando un costo inicial de 193 mil millones de pesos presentando por la Sedena en 2019 para el proyecto.
Por otra parte, el investigador de Gasto Público en México Evalúa, Jorge Cano, apuntó que de 2012 a 2022, el Poder Judicial de la Federación (PJF) ha gastado menos recursos de los aprobados, pero rechazó que estos subejercicios sirvan para fondear los fideicomisos, como argumentan legisladores, ya que tiene la obligación de regresarlos a la Tesorería de la Federación (Tesofe).
Comentó que con la eliminación de 13 de 14 fideicomisos del Poder Judicial de la Federación (PJF) por un monto de 15 mil millones de pesos, iniciativa promovida por la fracción de Morena, aprobada por la Cámara de Diputados y turnada para su aval al Senado de la República, ahora tendrá que utilizar su gasto corriente para hacerse cargo de las diferentes responsabilidades, como pensiones o gasto de infraestructura.
Mencionó que el presupuesto que solicitó el PJF para 2024 está 2.7 por ciento por debajo de lo ejercido en 2018, lo que muestra que este poder se ha autoimpuesto medidas de austeridad, a pesar de lo cual el Gobierno federal quiere limitarle aún más sus recursos.
Cano expuso que, con el recorte de 15 mil millones de pesos en sus 13 fideicomisos, extinguidos el gasto o recursos efectivos que tendría el PJF en 2024, quedarían en 19.9 por ciento por debajo de lo que tenía en 2018.
Señaló que una parte preocupante es que, incluso con el presupuesto solicitado para 2024, el Tribunal Electoral sería el ente del Poder Judicial más castigado, con una reducción de 23 por ciento, “lo cual sería un riesgo en un contexto electoral donde se podrían suscitar mayores impugnaciones ante este tribunal”.