Tras ocho meses en desaceleración, la inflación puede repuntar y cerrar el año hasta en seis por ciento si persiste el conflicto en Medio Oriente, suceso que también amenaza con debilitar los números del erario, dijo la integrante de la Comisión Técnica de Finanzas y Sistema Financiero del Colegio de Contadores Públicos de México (CCPM), Araceli Espinosa.
Una de las consecuencias de la guerra entre Israel y Hamas es el encarecimiento del petróleo, lo que generará mayores presiones en los precios de productos y servicios del país.
De hecho, ya se registra un incremento en la cotización del llamado oro negro. Las referencias internacionales de crudo WTI y Brent cotizan entre 88 y 93 dólares, niveles que ya preocupan a analistas.
En entrevista con La Razón, la especialista detalló que, ante el incremento de los petroprecios, las arcas del país obtendrán mayores ingresos por las exportaciones. Sin embargo, el precio de las gasolinas que México importa desde Estados Unidos será más caro.
Ello, dijo, obligará al gobierno federal a “inyectar” más dinero para continuar con los subsidios de las gasolinas, con el fin de evitar alzas agresivas en el precio del energético y una escalada en los demás bienes y servicios del país.
“La guerra en Medio Oriente sí produce problemas en la economía de México, porque si bien, por una parte, se reciben más recursos por la venta de petróleo, por otra, se incrementan los costos de la importación de gasolina”.
“Por tanto, parte ( o todo) de las utilidades por exportación de crudo se las come la importación de gasolina”, añadió.
Si dicha compensación no es suficiente para mantener el subsidio a las gasolinas, el gobierno no tendrá más opción que recortar gasto para otros rubros.
Bajo ese escenario, la inflación, que perjudica más a la población de escasos recursos, se verá presionada un tanto por la especulación y otro por el incremento de los precios del petróleo.
“El ciudadano de a pie lo va a ver, eso es un hecho, antes de que termine el año, máximo es un mes”, acotó.
En septiembre, la inflación general anual descendió de 4.64 a 4.45 por ciento, niveles no vistos desde febrero del 2021, según datos del Inegi.
La semana pasada, el subgobernador del Banco de México, Omar Mejía, reconoció que el conflicto entre Israel y Hamas puede recrudecer el panorama inflacionario en el país, a través del aumento en los precios del crudo.
“Entre los riesgos que están al alza tenemos un aumento reciente en los precios del petróleo, dada la mayor incertidumbre por el inicio del conflicto en Medio Oriente”, señaló en el podcast Norte Económico.
El viernes, la mezcla mexicana de exportación cerró en 84.58 dólares por barril, lo que implica un aumento de 21.33 por ciento en el año.
“El repunte de los precios globales del crudo, a raíz de la guerra entre Israel y Palestina, (...) representará el mayor riesgo para las cifras de (inflación) de octubre”, señaló Marcos Arias, analista de Monex Grupo Financiero.