Seis de cada 10 tazas de café en México son de Nescafé

El café es una de las bebidas más consumidas en el mundo. Para empezar el día, para las juntas de media tarde, para la sobremesa de la comida, para leer ese libro que tanto nos gusta y para la charla de la noche, no puede faltar su compañía.

Cada mexicano consume 299 tazas anualmente, en promedio, la gran mayoría bajo el sello característico de la marca más icónica de Nestlé: Nescafé, la cual cumple 75 años dando sabor a los hogares del país.

Seis de cada 10 tazas que se consumen se elaboran en una de las dos fábricas de la compañía; además, en México se produce una de cada siete tazas que se beben en el mundo, dice Fernando César, vicepresidente de Cafés y Bebidas para Nestlé México, en charla con La Razón.

Detrás de cada sorbo, hay todo un proceso de producción que se caracteriza por el cuidado del medio ambiente, un tema que va desde el campo, hasta la distribución en el mercado de sus principales marcas.

¿Dónde adquieren el grano que utilizan? Dependemos mucho de las mezclas que hacemos y éstas son dictadas por el perfil del consumidor; la mayor parte del café la adquirimos en México, lo que nos hace el comprador más grande en el país; sin embargo, no adquirimos la mayor proporción de la cosecha nacional, porque México es un productor muy importante, que mucho de lo que elabora exporta. También importamos de otros orígenes; entonces, no te puedo dar el número exacto de lo que compramos aquí, porque éste cambia de forma constante.

A nivel país, adquirimos en todos los estados cafetaleros. Tenemos nuestro programa Plan Nescafé presente en las cinco entidades líderes, que son Chiapas, Veracruz, Puebla, Oaxaca y Guerrero. Nuestro foco está en ellas, que producen más de 95 por ciento del cultivo nacional.

¿Cuál es el perfil del consumidor mexicano? Somos consumidores de café desde siempre, es parte de la rutina diaria. Éste tiene una penetración de 97 por ciento en las familias y el soluble, de 94 por ciento, liderado por la marca Nescafé; eso quiere decir que el café soluble está presente en 94 de cada 100 hogares del país.

El consumo per cápita en México que nosotros medimos, año con año, está en alrededor de 299 tazas y ha tenido una tendencia de crecimiento de entre tres por ciento y cuatro por ciento de forma anual, en al menos 20 años que yo tengo siguiendo este indicador.

Sin duda, el consumo va creciendo y lo que ha pasado mucho es que se ha ido sofisticando, particularmente entre los más jóvenes, quienes buscan especialidades como cafés fríos y lates, además de un interés creciente por conocer el origen del grano.

No sólo somos grandes consumidores de café, también somos el mayor país productor: una de cada siete tazas que se consumen en el mundo se elabora aquí, en alguna de nuestras dos instalaciones, la de Toluca, que es la más antigua, con más de 60 años, o Veracruz, que la inauguramos hace apenas dos años, con una inversión de 340 millones de dólares. Hoy, ahí podemos producir nuestro producto más emblemático, que es Nescafé clásico, y diversos productos premium.

Una parte de lo que se produce, entre 10 y 15 por ciento, se exporta a Estados Unidos y algunos países de Centro y Latinoamérica, y planeamos crecer a otras regiones, como Canadá y Europa. Sin embargo, la mayoría se quedará todavía en México.

¿En qué consiste el Plan Nescafé? Es una iniciativa global que tiene su enfoque en apoyar la producción y el abasto sustentable de café, así como fortalecer la capacidad productiva de los pequeños productores.

Tenemos cuatro ejes de desarrollo en esta iniciativa: trabajamos mucho a través de nuestros centros de investigación para evaluar y desarrollar plantas que tengan las mejores condiciones para la tierra; éstas, después, las distribuimos entre las comunidades, como un segundo eje. Son ejemplares que tienen mayor rendimiento por hectárea, además de mejor resistencia a plagas como la roya, que ha afectado mucho al café en México y todo Centroamérica. Un tercer eje es la capacitación a caficultores para que tengan las mejores prácticas de producción, tanto para cuidar las plantas como el ecosistema donde el café se cultiva. Finalmente, damos asistencia técnica y de formación empresarial para las comunidades.

Para dar alguna idea de los resultados, al día de hoy hemos apoyado a más de 18 mil caficultores afiliados formalmente al programa, esto no significa que son los únicos a quienes compramos café, nosotros adquirimos el grano de aproximadamente 80 mil caficultores del país.

Además, hemos entregado más de 56 millones de estas plantas y hemos dado una gran cantidad de capacitaciones en agroemprendimiento, sobre todo entre las generaciones más jóvenes. Son resultados muy, muy, favorables hasta ahora que nos motivan para seguir invirtiendo y a seguir ampliando la naturaleza de este programa.

Un dato. Con el objetivo de seguir creciendo, Nescafé invertirá 20 mil 500 millones de pesos al 2030 en el Plan Nescafé 2030. Esta inversión se suma al Plan Nescafé existente, el cual se presentó hace 10 años, a medida que la marca aumenta su labor de sostenibilidad, respaldada por el financiamiento de la agricultura regenerativa de Nestlé.