La venta de vehículos nuevos sigue por el carril de alta velocidad. En noviembre se comercializaron 128 mil 961 unidades, el mayor número en 47 meses, desde diciembre del 2019, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Con respecto a igual periodo del 2022, la comercialización de autos ligeros tuvo un avance de 31.9 por ciento, con lo cual sumó 19 meses de crecimiento. Frente a noviembre del 2019, antes de la pandemia, el aumento fue de 3.3 por ciento.
Así, en los primeros 11 meses del año ya suman un millón 218 mil 474 unidades, 25.4 por ciento más que en igual lapso del 2022 y 2.6 por ciento más que en 2019. En el periodo, Nissan tuvo la mayor participación en el mercado, con 17.8 por ciento. Le siguieron General Motors, con 13.5 por ciento; Grupo Volkswagen, con 11.1 por ciento; Toyota, con 7.7 por ciento, y KIA, con 7 por ciento.
Gabriela Siller, economista en jefe de Banco Base, explicó que parte del resultado obedece a una demanda rezagada de unidades, luego de la menor producción que se registró meses atrás por la escasez de algunos insumos, entre ellos los chips.
Sin embargo, añadió, es un hecho que la actividad económica muestra una mayor dinámica, que se refleja en la comercialización de autos.
Este hecho viene impulsando un mayor endeudamiento de los hogares mexicanos con la banca comercial para adquirir un vehículo a crédito, el cual alcanzó su mayor alza en registro, pese al incremento en las tasas de interés.
El financiamiento otorgado a las familias del país ascendió a 169 mil 967 millones de pesos en septiembre (último dato disponible), lo que significó un crecimiento anual de 39.71 por ciento durante el mes, el mayor desde febrero del 2012 que hay datos disponibles, según el Banco de México.
Lo anterior, pese a que la tasa de interés promedio subió de 12.2 a 15 por ciento entre junio del 2021 e igual mes del 2023, según el reporte “Situación Regional Sectorial” del segundo semestre del 2023.
“El alto costo del crédito que ha provocado la política monetaria (del Banco de México) no ha inhibido la demanda por este tipo de financiamiento para adquirir automóviles”, señaló el economista en jefe de BBVA México, Carlos Serrano.
De acuerdo con el especialista, el elevado precio de las unidades nuevas ya propició que también se incrementen los precios en el mercado secundario, lo que hace necesario el uso del crédito para fondear este tipo de bienes duraderos.
Datos del Inegi muestran que, desde el primer trimestre del 2021, el precio de los vehículos aceleró su crecimiento. Justo en marzo de ese año alcanzó su pico de este ciclo alcista, con un incremento de 9.46 por ciento.
En los primeros 10 meses del 2023, la inflación en autos registró una tasa anual promedio de 5.85 por ciento, que aún es mayor a la observada antes de la pandemia de Covid-19: 4.50 por ciento, en el mismo periodo del 2019 y 3.43 por ciento, en 2018.
BBVA, el mayor prestamista
El banco de origen español encabeza el financiamiento en el sector automotriz, con uno de cada cuatro automóviles en el segmento bancario, es decir, una participación de mercado de 25 por ciento.
En 10 años, la institución ha otorgado alrededor de un millón 200 mil créditos automotrices, con una cartera cercana a los 50 mil millones de pesos.
Consumo, con nuevo máximo; aumenta 0.8% en septiembre
La demanda privada en México alcanzó un nuevo máximo (108.8 unidades). En septiembre creció 0.8 por ciento con respecto al mes previo, su mayor alza desde abril, con lo que se expandió por cuarto mes consecutivo y se mantiene como uno de los principales motores de la economía nacional.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que, por componente, el consumo de bienes de origen importado creció 1.8 por ciento y el de bienes y servicios de origen nacional, 0.8 por ciento de manera mensual.
Banorte destacó que la demanda sigue soportada por fundamentales saludables, como ganancias salariales adicionales, una aceleración en las remesas y la fortaleza del crédito en este rubro.
De acuerdo con el Inegi, el consumo aumentó 5.0 por ciento en septiembre de este año con relación a igual mes del 2022, con lo que aceleró su crecimiento desde 4.4 por ciento en agosto y extendió su avance por 31 meses al hilo a tasa anual.
A su interior, detalló el reporte del instituto, el gasto en bienes de origen importado creció 24.3 por ciento y en bienes y servicios nacionales subió 1.7 por ciento anual, con datos desestacionalizados.