Tal como se esperaba, la inflación en México repuntó durante noviembre y rompió una racha de nueve meses a la baja. Sin embargo, fenómenos como El Buen Fin ayudaron a que el alza fuero menos abrupta de lo esperado.
El Índice Nacional de Precios al Consumidor, con el cual se mide la inflación en el país, aumentó de 4.26 a 4.32 por ciento en noviembre, dio a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). El consenso del mercado preveía una tasa de 4.39 por ciento.
Marcos Daniel Arias, analista de Monex, explicó que la dinámica del mes estuvo caracterizada tanto por el retiro de los subsidios a las tarifas eléctricas en estados con altas temperaturas, como por las promociones del Buen Fin 2023, que “arrastraron” a la baja los precios de varios tipos de mercancías.
Sin embargo, “dado que la magnitud de la distorsión que generan estos eventos es significativa, será prudente esperar a revisar las cifras de diciembre para tener mayor claridad sobre la tendencia, pero al ser datos que pudieron haber mostrado un rebote mayúsculo, la tibieza de la información publicada hoy es una señal alentadora”, dijo.
De hecho, la inflación subyacente (mercancías alimenticias y no alimenticías, además de servicios), que es un reflejo del nivel de precios futuro, bajó de 5.50 a 5.30 por ciento en el onceavo mes del año. En tanto, la no subyacente (alimentos no procesados y tarifas energéticas) subió de 3.83 a 3.92 por ciento, por el efecto de las tarifas eléctricas.
A tasa mensual, la inflación se ubicó en 0.64 por ciento, siendo su nivel más alto desde enero de este año. El repunte se debió a las mercancías alimenticias, dentro del componente subyacente y por los productos pecuarios y energéticos dentro del componente no subyacente, destacó Banco Base.
Los productos y servicios que más subieron de precio en el mes fueron electricidad, con 22.3 por ciento; huevo, con 9.65 por ciento y tomate verde, con 24.91 por ciento. También destacaron vivienda propia, azúcar, refrescos, transporte aéreo y servicios profesionales.
“Los resultados estuvieron en línea con nuestras proyecciones, en general, con una modesta sorpresa a la baja debido a una inflación de mercancías no alimenticias menor a la estimada, asociada a los efectos del periodo de descuentos de El Buen Fin”, señaló Citibanamex.
Para Alejandra Marcos, directora de Análisis de Intercam, el resultado de la inflación viene a abonar en la narrativa de que el primer recorte a las tasas de referencia por parte del Banco de México pudiera ocurrir en el primer trimestre del 2024. “Sin embargo, no hay que perder de vista que los riesgos en el panorama permanecen, siendo el mayor gasto público y el aumento al salario mínimo como los más importantes”, expuso.
Para el siguiente año, el Gobierno planea erogar nueve billones de pesos, una cifra récord, mientras que el salario mínimo aumentará 20 por ciento.
BBVA expuso que se anticipa otro “pequeño” rebote en diciembre en la inflación, que la llevará a cerrar el año en torno a 4.5 por ciento a tasa anual.
Sin embargo, destacó que la cifra está “muy por debajo” de los niveles de cierre del 2021 (7.4 por ciento) y 2022 (7.8 por ciento). En su opinión, el Banco de México iniciará un ciclo de reducción de tasas de interés en el primer trimestre del 2014 para evitar un apretamiento adicional e innecesario de la postura monetaria
Otis es la tercera catástrofe más costosa para las aseguradoras
Las pérdidas aseguradas que dejó Otis a su paso en Guerrero siguen en ascenso. A poco más de un mes que se suscitó el huracán, ya suman 30 mil 622 millones de pesos; es decir, más de mil 600 millones de dólares, informó la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS).
Con ello, el meteoro ya está dentro de las tres catástrofes más costosas para la industria, según los últimos datos de la asociación, los cuales, dijo, se están actualizando.
La pandemia de Covid-19 es el evento más costoso, con tres mil 472 millones de dólares; le sigue el huracán Wilma, con dos mil 675 y en tercer lugar entraría Otis.
La AMIS dijo que las aseguradoras tienen registrados 27 mil 911 reportes de daños, de los cuales cuatro de cada nueve son viviendas aseguradas.
Poco dinero estatal. Los estados mexicanos manejan reservas “muy limitadas” para hacer frente a la reconstrucción y apoyo a la población afectada por los desastres naturales y para llevar a cabo acciones de prevención, dijo Moody’s en un reporte.
Entre 2020 y 2022, el saldo promedio de los fondos etiquetados para desastres naturales de los estados calificados por Moody’s Local México fue equivalente a 0.15 por ciento de sus ingresos operativos, un margen “muy limitado” para responder a eventos de alto impacto, como es el caso del huracán Otis.
Por lo tanto, los gobiernos subnacionales tienen una alta dependencia de recursos federales para hacer frente a los desastres naturales, añadió.
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