Dos de cada 10 juguetes que se venden en México provienen del contrabando o son robados, aseguró la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec).
“El flagelo del contrabando y la piratería inunda al mercado nacional de los popularmente conocidos juguetes chinos y ‘calientes’, producto de los asaltos carreteros”, expuso el organismo.
Este fenómeno, afirmó, propina un duro golpe al mercado legalmente establecido, al existir una diferencia de precio de hasta 56.51 por ciento.
“Debemos recordar que los juguetes chinos no pagan impuestos, financian la actividad delincuencial, no tienen durabilidad y poseen menos calidad”, expuso el presidente del pequeño comercio, Cuauhtémoc Rivera.
Otro problema igual o más preocupante es que se pone en riesgo la salud de los niños que tilizan estos juguetes, los cuales contienen sustancias tóxicas en el material del que están hechos, dijo.
De acuerdo con el Banco de México y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, hasta 2022, la industria juguetera generó ingresos de cuatro mil 560 millones de dólares. Para el periodo 2023-2027 se espera un crecimiento anual de 5.7 por ciento.
Por marca, los principales juguetes presentes en el mercado mexicano son Mattel, con 21.4 por ciento; Hasbro, con 21.1 por ciento; Lego, con 14.6 por ciento, Productos Infantiles Selectos (Prinsel), con 2.5 por ciento, y Spin Master, con 2.4 por ciento del segmento.
A pesar de la competencia desleal asiática, México continúa como uno de los principales productores mundiales de juguetes debido a sus reducidos costos de mano de obra, así como su localización estratégica como puerta de entrada a Estados Unidos y otros países de América Latina.
El grueso de la producción local corresponde a 2.6 por ciento de unidades económicas medianas y grandes, que concentran 71 por ciento del personal ocupado y casi 90 por ciento de la producción, cuyo destino principal es la exportación.
Entre estas empresas destacan Bicileyca (productos Apache), Fotorama de México, Hasbro México, Juguetes Mi Alegría, Mattel México, Novedades Montecarlo, Prinsel y Lego México.
Los principales hubs de fabricación juguetera se localizan en los estados de Baja California y Nuevo León.
De acuerdo con la Asociación Mexicana de la Industria del Juguete (Amiju), el 10 por ciento de la producción restante corresponde a juguetes tradicionales (trompos, baleros y muñecas, por ejemplo), que son fabricados por alrededor de 200 micro y pequeñas empresas, talleres y artesanos que, en su mayoría, no son formales. Se encuentran principalmente en Jalisco, Michoacán y Oaxaca.