El empresario Carlos Slim afirmó que la empresa telefónica Telmex, que adquirió en 1990, ya no es un buen negocio y está en números rojos desde hace como 10 años, pero descartó venderla “porque es mexicana” y por ello decidió seguir con la empresa.
En rueda de prensa convocada para hablar de la historia de Grupo Carso y que se prolongó por tres horas y media, estimó que hasta 2040 se aliviará la situación financiera de la empresa telefónica mexicana, debido que tiene un pasivo laboral de 270 mil millones de pesos y unos 20 mil jubilados, con una cantidad similar que son trabajadores activos.
Además, dijo, la situación actual de Telmex se debe también a que está entre las pocas empresas telefónicas en el mundo que ha sido excluida de dar el servicio de televisión de paga en México en los últimos 20 años,.
“Nos han bloqueado, las televisoras y el Gobierno; ya van cinco Gobierno que no lo autorizan, nos han hecho competir con un brazo amarrado”, afirmó.
Carlos Slim, la persona más rica de México, rechazó que ser el empresario más beneficiado por el Gobierno federal actual, ya que de toda la obra pública que ha hecho este Gobierno, sólo ganó la construcción del tramo 2 del Tren Maya, a través del consorcio encabezado por Operadora Cicsa, de Grupo Carso.
No nos han favorecido, no sé de dónde sacan eso, ni siquiera nos han dado la concesión para ofrecer el servicio de televisión de paga. La verdad es que no se nos haCarlos Slim Helú<br>Presidente vitalicio de Grupo Carso y de la Fundación Telmex
beneficiado como se dice
”No nos han favorecido, no sé de dónde sacan eso, ni siquiera nos han dado la concesión para ofrecer el servicio de televisión de paga. La verdad es que no se nos ha beneficiado como se dice”, afirmó.
El empresario mexicano de 83 años y quien se ubica en el sitio 10 de los grandes multimillonarios del mundo, reveló que acordó con el Presidente Andrés Manuel López Obrador que cuando acabe su Gobierno hablarán sobre los temas en los que difieren.
El presidente vitalicio de Grupo Carso y actual presidente de la Fundación Telmex consideró que a México le hacen falta dos cosas: que la inversión anual alcance entre el 28 y 30 por ciento del PIB.
“Y el sector privado estuviera al 20 por ciento, que no sería difícil. El gobierno al 5 por ciento más o menos y la inversión extranjera al 4 o 5 por ciento, nos vamos al 28-30 por ciento del PIB y con ello nos deberíamos ir muy rápido al desarrollo”, afirmó.
Al mismo tiempo, dijo, mejorar el nivel salarial, que actualmente es muy bajo. “Si podemos combinar una inversión de 28-30 de inversión con un mejor poder adquisitivo de la población, el país se va pa’arriba” dice Slim.
En cuanto a la iniciativa para reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales, el magnate de origen libanés opinó que el poder adquisitivo y el bienestar de la población no se logra trabajando menos, sino ganando más.
“Todo el que no trabaja el sábado, trabaja 40 horas. Deberíamos de manera legal todos los trabajos del Estado que no trabajan los sábados o los trabajadores privados que no trabajan los sábados, 40 horas. Dejarles el salario mínimo. Y el que trabaje 48 horas, en lugar de que trabaje 40 y esté buscando horas extras, subirle 20 por ciento el salario y que siga trabajando 48 horas”, añadió.
CONSOLIDAR TRANSICIÓN. En opinión del multimillonario mexicano, la administración actual “fue un Gobierno de transición. Ojalá que el Gobierno, sea el que sea quien gane, sea un Gobierno ya de consolidación, aprovechar el nearshoring”.
Se reservó opinar sobre el paquete de reformas constitucionales recientemente presentada por el Presidente López Obrador, entre las cuáles está la desaparición de organismos autónomos, como el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT).
“De los 20 puntos que planteó el Presidente, no quiero entrar a discutirlos, hay algunos que me parecen bien y otros me parecen mal”, atajó Carlos Slim, pero consideró que en el caso del IFT, que “si va a ser autónomo, que sea autónomo de a deveras”.
No obstante, resaltó que los tres Poderes de la Unión de la Unión tengan diferencias, “que la Suprema Corte dijera una cosa distinta la del Ejecutivo no era usual; no sólo no era usual, no se hacía, había una influencia enorme del Ejecutivo en el Judicial. Entonces, se me hace extraordinario que ahora el Poder Judicial decida cosas que están en contra del Ejecutivo”.
“Es muy importante que se ve, por primera vez en mi caso, una división de dos poderes fundamentales de la Nación”, subrayó sobre las diferencias que hay actualmente entre el Presidente López Obrador y la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
El empresario consideró que es demasiado el papel que están jugando las Fuerzas Armadas en el país, en relación a la participación que tienen en diversos proyectos del Gobierno Federal. “Estarlos metiendo en tantas cosas es un exceso”, dijo Carlos Slim.