La Inversión Extranjera Directa (IED) nueva en México apenas representó 13 por ciento del monto total que ingresó al país en 2023, la menor participación desde 1963 que existen datos disponibles, lo cual, dicen, refleja que la relocalización de empresas, el llamado nearshoring, no termina de concretarse.
El año pasado, la IED total sumó 36 mil 58 millones de dólares, una cifra récord y 2.3 por ciento mayor que la observada en 2022, según datos preliminares de la Secretaría de Economía.
De esa suma, cuatro mil 817 millones de dólares fueron inversiones nuevas, esto es, 73.5 por ciento menos que un año atrás, cuando 50 por ciento de la IED fue nueva. Además, la cifra del 2023 (13 por ciento) está lejos del máximo en registro, que fue de 88 por ciento en 1987, según datos de Banco Base.
“El bajo crecimiento de las nuevas inversiones indica que se está desaprovechando la oportunidad del nearshoring”, consideró Gabriela Siller, economista en jefe del grupo financiero. En su opinión, a México le ha faltado promoción en el exterior, certidumbre en la política económica interna, infraestructura en energía eléctrica y agua y un paquete de recibimiento para nuevas inversiones.
El 74 por ciento de la IED total del 2023 fue reinversión de utilidades, la mayor cifra en registro, mientras que otro 13 por ciento se explica por cuentas entre compañías.
“Si bien las tendencias de relocalización (en particular el nearshoring) podrían generar un impulso mayor que el estimado, hasta el momento, no vemos una materialización ‘masiva’ de este factor que ya esté reflejándose en un cambio de tendencia al alza en los ingresos por IED”, expuso Citibanamex.
Añadió que la IED del 2023 representaría dos por ciento del PIB, el más bajo desde 2012 (1.7 por ciento). De confirmarse la cifra preliminar, la IED habría retomado la tendencia decreciente como porcentaje del PIB, la cual comenzó en en el año 2015.
Expectativas. El consenso de los analistas consultados por Banco de México estima que la IED sumará 39 mil 367 millones de dólares este año; sin embargo, los especialistas más optimistas ven inyecciones de capital de hasta 53 mil 800 millones de dólares.
En su último reporte, la Secretaría de Economía, la cual encabeza Raquel Buenrostro, dijo que, al cierre del 2023, el Gobierno mexicano registró proyectos de inversión por 110 mil 744 millones de dólares, a través de 378 anuncios, los cuales se van a desarrollar en dos o tres años.
Muchos de estos proyectos están relacionados con el proceso de relocalización de empresas.
En entrevista con La Razón, Buenrostro aseguró que la actividad económica nacional vive una de sus mejores etapas en la historia, lo cual es conocido en el mundo como el “momento mexicano”.
En términos generales, acotó, México es el país más atractivo para la inversión en América, por su alta competitividad y factores como mano de obra calificada y en constante preparación.
Esto, añadió, en un entorno de manejo de finanzas públicas sanas, mayor recaudación de impuestos, estabilidad económica, menor inflación, mayor confianza empresarial y paz social.
En su opinión, los inversionistas extranjeros tienden a ser más optimistas que los nacionales, porque “el nacional se llena la cabeza de telarañas con la política, mezcla lo político con lo económico y tarda en tomar decisiones”.
La funcionaria confió en que la inversión se siga materizalizando, aunque reconoce retos hacia adelante.
Cofece condiciona compra de plantas de Iberdrola
La Comisión Federal e Competencia (Cofece) sujetó al cumplimiento de condiciones la autorización de la compra de 13 plantas de generación eléctrica de Iberdrola, por parte de Mexico Infrastructure Partners y el Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin).
Las condiciones impuestas obligan a los compradores a operar las plantas de manera independiente en el mercado y evitar intercambios de información sensible o estratégica entre competidores. Los compradores deberán aceptar, de manera expresa e incondicional, las peticiones establecidas por el organismo para poder cerrar la transacción, expuso.
“Estas Condiciones tienen una vigencia de 10 años y serán constantemente verificadas por la Cofece a través de diversos mecanismos establecidos en la resolución”, señaló en un comunicado.
La Secretaría de Hacienda comentó que la operación debe concluirse en los próximos seis meses y reiteró que el Estado recupera el liderazgo en la generación en la energía eléctrica, pues sumará la generación de ocho mil 500 MW adicionales para superar el objetivo de contar con 54 por ciento en la generación eléctrica del país.
