La cifra de 245 mil toneladas de petroquímicos producidos por Petróleos Mexicanos (PEMEX) en el segundo trimestre del año refleja un aumento de 33 mil toneladas, o un 16%, en comparación con el mismo trimestre del año pasado.
Al cierre de 2018, la industria petroquímica de la empresa pública estuvo en abandono durante más de dos décadas, lo que resultó en una caída del 78% en la producción de las cadenas de metano, etano, aromáticos y propileno, desde 11.71 millones de toneladas en 1995 hasta 2.61 millones en 2018.
En el segundo trimestre de 2024, la producción de derivados del metano registró un aumento del 73.3%, según los datos de la petrolera, como consecuencia de la operación constante y estable de la planta de amoniaco VI en el complejo petroquímico Cosoleacaque, Veracruz.
El Complejo Petroquímico Independencia, en San Martín Texmelucan, Puebla, contribuyó a un aumento en la producción de metanol en un 76.9% gracias a la extensión del tiempo de operación de la planta de metanol no. 2, al superar así los resultados del mismo trimestre del año anterior.
De abril a junio, la producción de otros petroquímicos creció un 165.6%, gracias en gran medida al incremento en la producción de anhídrido carbónico en el complejo petroquímico Cosoleacaque.
La materia prima en varias cadenas de producción de hidrocarburos y en numerosas industrias, como la textil, automotriz, alimentaria y de fertilizantes, proviene de los petroquímicos, que son líquidos o gases resultantes del procesamiento del Gas Natural o de la refinación del petróleo.
De los ocho complejos petroquímicos que PEMEX tiene en la actualidad, únicamente seis están en funcionamiento, y cuenta también con diez complejos procesadores de gas.
La recuperación de todas las industrias de PEMEX permitió reducir las compras de petroquímicos en el extranjero, de acuerdo con Octavio Romero Oropeza, director general de la empresa, lo cual se alinea con el objetivo de rescatar la compañía. La autosuficiencia que busca PEMEX priorizó la producción de combustibles de transporte como gasolinas, diésel y turbosina.
Desde octubre de 2020, la primera planta de urea y amoniaco en Cosoleacaque comenzó a operar, lo que, sumado a la recuperación de la industria petroquímica de la petrolera, impulsó la producción de fertilizantes, con cuatro plantas operativas en la actualidad.
En comparación con las 781 mil toneladas producidas en 2018, la petrolera espera que al cierre de 2024 la producción de fertilizantes sea de un millón 535 mil toneladas, lo que representa un 97%.
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