Por tercera ocasión en el año y con el voto disidente del subgobernador Jonathan Heath, el Banco de México (Banxico) redujo en 25 puntos base la tasa de interés para dejarla en 10.50 por ciento desde el 10.75 por ciento previo; además de que adelantó que se espera que la inflación siga caminando hacia el objetivo del 3.0 por ciento, lo que permitirá hacer más ajustes a la tasa clave.
“Hacia delante, se prevé que el entorno inflacionario permita ajustes adicionales a la tasa de referencia”, destacó el organismo monetario, que enfatizó que se tomará en cuenta la perspectiva de que los choques globales continuarán desvaneciéndose y los efectos de la debilidad de la actividad económica.
La decisión del Banxico estuvo en línea con el consenso de los analistas, quienes esperaban un recorte de un cuarto de punto a la tasa de referencia debido a la desaceleración en la inflación general, que en la primera quincena de septiembre se situó en 4.66 por ciento, así como por el reciente ajuste de 50 puntos básicos a los tipos de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos.
El banco central explicó que tras una valoración, se llegó a la conclusión de que, si bien el panorama inflacionario en México aún amerita una postura restrictiva, la desaceleración que ha presentado da señales de que “es adecuado reducir el grado de apretamiento monetario”.
Esto porque la inflación general ha disminuido desde 5.57 por ciento en julio pasado como resultado de la reversión parcial en los choques de oferta que han afectado al componente no subyacente, en el que se encuentran los productos agropecuarios y las tarifas eléctricas.
Señaló que la inflación subyacente, la de mercancías alimenticias y no alimenticias, siguió con su trayectoria a la baja, situándose en 3.95 por ciento en la primera mitad de septiembre y se prevé que continúe su tendencia bajista. Con esto, ajustó sus pronósticos de precios en el país a la baja, por lo que estima que para finales del año la inflación general llegue a 4.3 por ciento desde 4.4 por ciento estimado en la reunión de política monetaria del pasado 8 de agosto. En tanto, espera que para el cuarto trimestre del 2025 se alcance la meta del 3.0 por ciento +/- un punto porcentual.
En cuanto a la inflación subyacente, el pronóstico también se ajustó a la baja para finales de este año y principios de l2025 a 3.8 por ciento y 3.5 por ciento anual desde 3.9 y 3.6 por ciento, respectivamente; asimismo, se prevé que el componente subyacente cierre en 3.0 por ciento anual a finales del primer año de administración de Claudia Sheinbaum.
Por otra parte, los integrantes de la Junta de Gobierno reconocieron que desde la decisión de política monetaria previa, el peso continuó exhibiendo “una marcada volatilidad” e indicaron que la actividad productiva nacional atraviesa por un periodo de debilidad, en un contexto de elevada incertidumbre por factores externos e internos; mientras que en el mercado laboral, el empleo se ha desacelerado y en el balance de riesgos para la actividad económica se mantiene sesgado a la baja.
Por lo anterior, cuatro miembros del Banxico votaron a favor de reducir la tasa de interés; se trata de la gobernadora Victoria Rodríguez Ceja y las subgobernadoras Galia Borja Gómez e Irene Espinosa Cantellano, así como el subgobernador Omar Mejía Castelazo.
El único que no estuvo de acuerdo en recortar la tasa clave fue el subgobernador Jonathan Heath, quien votó por mantener el objetivo en el nivel de 10.75 por ciento.
Bajan pronósticos
Tras el segundo recorte consecutivo a la tasa de interés por parte del banco central y el tercero del año, los analistas también ajustaron sus previsiones sobre el nivel de la tasa objetivo para finales del 2024, la cual ahora esperan que baje hasta 10.00 por ciento.
Grupo Banorte consideró que ante la magnitud del recorte y las expectativas sobre la inflación y la actividad económica, los recortes seguirán en todas las decisiones de política monetaria del 2025, por lo que estimó que la tasa se situará en 8.00 por ciento a finales del siguiente año.
Para la directora de Análisis Económico de Banco Base, Gabriela Siller, la reducción de la tasa de referencia implica un menor costo de deuda financiera para las empresas y el Gobierno, una disminución en las tasas de créditos, así como un incentivo al consumo y a la inversión.
Peso gana 2.6 centavos frente al dólar
Tras la decisión del Banco de México (Banxico) de bajar 25 puntos básicos a la tasa de interés, el peso mexicano cerró con valores positivos la jornada, en la que ganó 0.13 por ciento o 2.6 centavos frente al dólar, con lo que el tipo de cambio se ubicó en 19.61 unidades por divisa estadounidense.
De acuerdo con analistas de Base y Monex, el avance del peso se dio a la par de una debilidad generalizada del dólar, cuyo índice DXY cayó 0.43 por ciento. Con esto, el tipo de cambio tocó un mínimo de 19.4676 y un máximo de 19.7514 pesos por billete verde.
Hacia el overnight, se espera que el peso oscile en un rango entre 19.50 y 19.77 pesos, “considerando el comportamiento actual y esperando las cifras de inflación PCE (Índice de Precios de Gastos de Consumo Personal) en EU”, señaló Monex.
Por otra parte, el mercado de capitales cerró con ganancias a nivel global debido al optimismo sobre el crecimiento económico de China luego del anuncio de mayores estímulos.
Así, en Estados Unidos, el Dow Jones, el NASDAQ Composite y el S&P 500 mostraron un avance de 0.62, 0.60 y 0.40 por ciento, respectivamente. En México, el IPC de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) cerró con una ganancia de 0.75 por ciento o de 53 mil 590.52 puntos.
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