Durante la Convención Anual de la Asociación Mexicana de Parques Industriales Privados (AMPIP), el secretario de Economía, Marcelo Ebrard Casaubón, explicó la lógica detrás de la reforma a los organismos constitucionalmente autónomos, afirmando que ésta busca alinear las regulaciones mexicanas con el modelo estadounidense.
Subrayó que el concepto de autonomía, introducido en México desde el modelo europeo, no tiene una equivalencia directa en el marco jurídico de Estados Unidos ni es una obligación contemplada en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
“Lo que se está haciendo es una reforma para crear algo similar al modelo de Estados Unidos: un órgano nacional con independencia técnica, cuyo objetivo principal es impedir los monopolios. En Estados Unidos no hay un Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), pero sí organismos como la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece)”, puntualizó.
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Lo que se está haciendo es una reforma para crear algo similar al modelo de Estados Unidos: un órgano nacional con independencia técnica, cuyo objetivo es impedir los monopolios
Además, justificó la reforma al argumentar que tener dos órganos reguladores con características similares es excesivo para el contexto mexicano, y que esta medida permitirá una mayor eficiencia normativa y una mejor alineación con las obligaciones del tratado comercial.
Asimismo, el secretario presentó estrategias para aumentar el contenido nacional en las exportaciones mexicanas, revelando esfuerzos para atraer inversión y fomentar la producción local. En este sentido, mencionó conversaciones con empresas globales como Intel, Foxconn, General Motors y Ford para identificar componentes que podrían fabricarse en México.
“Por ejemplo, el próximo año, México comenzará a producir microchips. Aunque no serán los más avanzados, será un paso importante para fortalecer nuestra industria tecnológica. Ya hay proyectos en marcha en Tijuana y Jalisco”, afirmó.
En relación con la renegociación del T-MEC, programada para mediados de 2026, el secretario de Economía enfatizó la importancia de iniciar las conversaciones lo antes posible, anticipando la dinámica con los socios comerciales, incluido el presidente electo Donald Trump, quien podría desempeñar un papel relevante en este proceso.
“El grueso de las exportaciones mexicanas a Estados Unidos proviene de empresas que forman parte de la cadena de valor norteamericana. Esto nos diferencia de otros países y fortalece nuestra posición negociadora” y destacó que México está preparado para defender sus intereses y presentar datos sólidos en las próximas rondas de diálogo.
