Ante las medidas económicas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, México puede cambiar su modelo económico aprovechando su industria y el apetito que hay sobre su territorio por parte de otros países que ven en él una opción de estar cerca del vecino del norte y ante una serie de complicaciones geopolíticas que han paralizado a algunas naciones europeas.
De acuerdo con analistas, las medidas que busca tomar el republicano responden a que Estados Unidos está perdiendo una guerra comercial contra China que ha derivado en una crisis social, económica, militar e industrial, por lo que busca proteger los intereses de esa nación.
Ante ello, la integración que tiene con las economías de sus socios del Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) generará impactos negativos para esos países; pero en el caso de México esto podría significar una oportunidad para su desarrollo interno.
Recientemente se presentó el Plan México, un instrumento que bien implementado permitirá fortalecer las cadenas intermedias para después tener sectores productivos completos que atiendan la demanda del mercado interno y posteriormente pueda competir en el exterior con tecnología propia.
Además de que lograrán atender la llegada de inversiones de otros países como los provenientes de Europa que han incrementado su presencia e inversiones en México de manera estratégica ante los bloqueos comerciales de los que han sido objeto por parte de Estados Unidos, destacó en entrevista con La Razón, Oscar Rojas, profesor de Economía Política por la UNAM.
Estos factores generan grandes oportunidades para el país, siempre y cuando se busque transitar del modelo económico maquilador al manufacturero.
Por ello, detalló que el Plan México es la opción para hacer esta modificación, ya que el proyecto neoliberal que se venía siguiendo desde el inicio del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), exacerbó esta condición de la industria nacional.
No obstante, para Ignacio Martínez, coordinador del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios (LACEN), este plan todavía está lejos de ser la política industrial que el país necesita, ya que no se le ha dado la relevancia que realmente merece, ejemplo de ello es que no se le asignó una partida en el Presupuesto de Egresos de la Federación de 2025.
El plan México tiene claridad total sobre que el país debe reindustrializarse; es decir, transitar del modelo anterior maquilador, a ser un país manufacturero, que pueda producir cadenas completasÓscar Rojas, Profesor de la UNAM
“No es (un impulso) porque no tiene presupuesto como tal. Hay una máxima que dice que: prioridad que no se refleja en el presupuesto no es prioridad, y el Plan México como tal no se refleja en el Presupuesto de Egresos 2025”, sostuvo.
A pesar de esto, para Josafat Hernández, especialista en Filosofía Política y Económica del Centro de Investigación y Docencias Económicas (CIDE), México tiene potencial para aprovechar las oportunidades, ya que cuenta con fortalezas en términos de finanzas públicas, de inversiones en infraestructura, como la construcción de los polos de desarrollo y un mercado interno que busca fortalecerse y mejoras salariales sustanciales; sin embargo, reconoce que el T-MEC “tiene a México atado de manos” para buscar nuevos socios.
“Lamentablemente México está de manos atadas por el T-MEC, ya que le prohíbe establecer acuerdos comerciales con China, que sería la forma más fácil de contrarrestar la dependencia de Estados Unidos; la cuestión aquí es que precisamente a una relación entre estos dos países y a su vez con la nueva dinámica que va a tener el gobierno de Estados Unidos que ya nombró a (Ronald) Johnson como nuevo embajador de nuestro país, van a querer constantemente expulsar las inversiones de China que hay en México, entonces es un tema muy complejo”, sostuvo a este diario.
Para el especialista, es de suma importancia que México, a la par del fortalecimiento de su industria interna, busque nuevos horizontes comerciales, al cuestionar que hace unos meses el Gobierno mexicano no se acercó a la asociación de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) en la cumbre de Kazán, en Rusia. “Es un tema muy complejo, porque México no se acercó a BRICS, en la cumbre de Kazán se presentaron algunos países para hacer socios y México ni siquiera apareció entre los países interesados”.